Las propuestas que pertenecen a ideologías de extrema derecha, además de descalificaciones o agresiones hacia determinados sectores por su condición social o su simpatía política, son habituales entre algunos conductores y periodistas en la televisión argentina, principalmente del canal La Nación+. 

Esta vez, el periodista de LN+ Eduardo Serenellini, directamente propuso prohibir el voto a toda persona que recibe "algún tipo de ayuda social", bajo el argumento de evitar el clientelismo y que se transformen en "votantes cautivos". Y en la misma línea se pronunció la conductora Viviana Canosa, del canal A24, aunque utilizando una noticia falsa sobre los planes sociales en Dinamarca.

En su idea de inhabilitar el voto según si recibe o no ayuda del Estado, Serenellini no aclaró si tomaría en cuenta como "ayuda social" los cientos de millones de pesos que reciben en concepto de publicidad oficial y de distintos estamentos del Estado los medios de comunicación en los que trabaja; ni los subsidios estatales a los servicios en su zona; ni los fondos ATP que otorgó el Estado a las empresas que lo emplean y otros subsidios a empresarios, entre algunos ejemplos.

Sin embargo, propuso un proyecto de ley para prohibir el voto universal y que no puedan votar quienes reciben ayuda social.

En Twitter, donde el periodista además destacó su publicación como fijada, cientos de usuarios cuestionaron su idea y le preguntaron si tendría en cuenta para la prohibición los cientos de millones de pesos que recibe La Nación como pauta oficial o los subsidios ATP durante la pandemia. No respondió a ninguna de esas consultas. 

Poco después, propuso que tampoco puedan votar quienes están presos.

¿Y la democracia? Dos conductores de TV piden prohibir el voto a sectores vulnerables

Por su parte, Canosa elogió y leyó en su programa una noticia falsa sobre la prohibición de votar en Dinamarca para aquellas personas que son beneficiarias de planes sociales. Sin embargo, no existe tal inhabilitación en ese país.

Esta desinformación, que ya fue verificada por el sitio Chequeado en 2019, ya había sido desmentida ayer por la Embajada de Dinamarca en la Argentina. Sin embargo, la conductora la leyó igualmente como cierta para justificar su pedido para prohibir el voto a sectores sociales más vulnerables.

Tweet de El 9 de Nepal
La Embajada de Dinamarca en Argentina desmintió la información sobre los planes sociales.
La Embajada de Dinamarca en Argentina desmintió la información sobre los planes sociales.

Añoranza del voto calificado

La idea del "voto calificado" no es nueva y no corresponde a gobierno democráticos, ya que solo pueden votar determinados sectores sociales, principalmente por su posición económica. En cambio, el voto universal otorga el derecho a toda la población de un Estado, independientemente de su procedencia, raza, sexo, edad, creencias o condición social.

Muchos países establecieron el voto calificado por razones raciales, étnicas, sexuales o sociales (como la pobreza o el analfabetismo), exclusiones que afectan la esencia misma del voto universal. Un ejemplo es la prohibición prohibición generalizada de votar que muchos países occidentales impusieron a las mujeres durante el siglo XIX y gran parte del siglo XX.

En Argentina el voto secreto y obligatorio para mayores de 18 años se instauró en 1912 con la llamada Ley Sáenz Peña, aunque no fue hasta 1951 que las mujeres pudieron votar gracias a la ley 13.010 de sufragio femenino, también conocida como Ley Evita.

El voto en Argentina

En nuestro país el voto es universal, igual, secreto y obligatorio. Lo determina la ley y lo garantiza la Constitución.

Es universal: porque es un derecho que le corresponde a todos los argentinos mayores de 16 años independientemente de su raza, sexo, creencias o condición social.

Es igual: El valor que tiene tu voto es el mismo para todos los ciudadanos. Una persona, un voto.

Es secreto: para que nadie pueda influir en tu voto.

Es obligatorio: Votar no es solo un derecho, es un deber.