Pero ya hay dos jugadores que desde hace varios días están entrenado junto al cuerpo técnico, aunque también vinieron antes para ir adaptándose a la institución y a la ciudad, ellos son Martín Ghirardi y Bruno Ingratta. 

Por un lado el escolta oriundo de Villaguay dijo que “estoy esperando con todo el inicio de la pretemporada. Es lindo venir unos días antes así ya te vas acomodando al departamento y a la ciudad. Estoy con muchas esperanzas sobre el equipo que se formó y ahora hay que trabajar duro para poder estar bien arriba”

Siguiendo con el tema de la adaptación y la venida a San Isidro, Ghirardi agregó: “Este lugar es muy lindo para vivir, sé por amigos que han jugado acá que el club está haciendo las cosas bien desde varios años, entonces cuando recibí la propuesta de jugar en San Isidro no lo dudé. Además, estoy cerca de mi casa, fui papá hace poquito, mi bebé tiene 8 meses y es muy importante estar en una ciudad así y rodeado de gente como la de este club, que te trata muy bien y que hace que no te falte nada. También vine un poco para probar el sistema de juego de ‘Pirincho’ que a todos los rivales no les gusta, así que espero poder adaptarme rápido, ya que tenemos dos meses de pretemporada antes del primer partido oficial”.

Mientras que, Ingratta, que cumple la función de ala pivot expresó: “Estamos cómodos acá, yo hace unos días más que estoy en San Francisco y tuve más tiempo para conocer la ciudad que me pareció muy bonita y tranquila. Estoy con muchas expectativas sobre el equipo pero también el hecho de tener buenos nombres no significa nada sino que hay que tratar de conformarse como equipo y ahí recién veremos para lo que estamos”

Con respecto sobre su llegada a este club explicó que “yo vine por un desafío, porque el entrenador tiene una forma distinta de juego a la que estoy acostumbrado y va a ser toda una novedad para mi, así que tengo que engancharme a ese sistema que pretende él. El otro objetivo que me hizo venir acá es el de conseguir el ascenso y a su vez el tema económico tuvo algo que ver, ya que nosotros vivimos del básquet. Además, la ciudad es muy buena para criar a los chicos, yo tengo una nena de 3 años y con mi mujer apuntamos al crecimiento de ella también”.