El Club Ateneo Deportivo Barrio Jardín, que milita en la Liga de Baby Fútbol, ocupa desde hace más de cincuenta años una parte del terreno ubicado entre Lavalle, French y Berutti, Caseros y  Av. 9 de Septiembre. Cuando el club se instaló, la parcela era propiedad del Gobierno de la Provincia de Córdoba, que lo cedió años después al establecimiento educativo.

La otra parte es utilizada como campo de deportes por los alumnos del IPET Nº 50 Emilio F. Olmos. Cuando el club creó este espacio, dio en préstamo el segmento restante al club de fútbol, que ya estaba instalado.

Hoy, el instituto técnico necesita vender una de las manzanas donde se encuentra Barrio Jardín para poder costear la construcción de un polideportivo en la manzana del medio, que sería anexado al campo de deportes. Sin embargo, Barrio Jardín se rehúsa a irse.

Malestar

Eladio Rodríguez, director técnico de una de las categorías del club asegura a El Periódico que esta cuestión lo tiene mal: “Es una institución de más de 50 años, sin fines de lucro. Es una vergüenza que no sea defendida”. Y agregó: “Ni una pelota de fútbol le han regalado y cuántos jugadores han salido de aquí. Está en un lugar que no molesta a nadie. Ojala lo tengan en cuenta las autoridades de San Francisco. No tiene por qué ser movido, hace cincuenta años que está acá, no es un día”, insistió.

Por su parte, Sandro Sidoni, entrenador y exdirigente, recordó que cuando se instalaron “esto era un monte” y comentó que a lo largo de los años construyeron dos canchas auxiliares y una cancha oficial con tribuna. También cabinas de prensa, salón de usos múltiples, vestuarios para locales y visitantes, baños para hombres y mujeres, secretaría y un pequeño kiosco.

Sidoni añadió que miembros del establecimiento educativo “jamás hicieron uso de las instalaciones” y manifestó que no entiende “por qué no se puede hacer con aportes provinciales o municipales” a la vez que aseveró que no se van a “quedar con las manos cruzadas”.

Según contó el entrenador, son 120 chicos lo que asisten al club y explicó que “el 80 por ciento son del barrio por lo que se les complicaría ir al nuevo predio, que estaría ubicado cerca de la Protectora de Animales”.

El club de Baby que se resiste a irse de su barrio

Desde el Ipet sostienen que deben vender

Omar Dabove, presidente de la cooperadora del IPET Nº 50, detalló que “el objetivo de la escuela es construir un polideportivo” y que no puede hacerse en la manzana donde se encuentra el campo de deportes “porque nos quedamos sin espacio para los chicos y porque no tenemos plata”.

Hace dos años que ellos tendrían que haber devuelto esos terrenos. En ese momento con ese dinero hacíamos el polideportivo con una casa de cuidador. Hoy no sé si lo hacemos”, agregó Dabove.

“El polideportivo serviría para que cuando llueva, haga frío o calor los chicos tengan un espacio para estar protegidos. A la vez serviría como un medio de entrada de dinero porque los fines de semana lo podríamos alquilar. Pero si no vendemos los terrenos, no tenemos forma”, afirmó el presidente de la cooperadora.

Por otra parte, Dabove aseguró que se hicieron muchas gestiones: “Si la Municipalidad decidía que Barrio Jardín se quedara ahí, nosotros no teníamos ningún problema, pero necesitamos el polideportivo. El terreno fue comprado con dinero de los alumnos y tenemos que darle un bienestar a ellos”.

“Buscamos otras alternativas”

Por último, Jorge Tomé Seif, director de la escuela técnica, confirmó que “buscamos otras alternativas. Con el último gobierno municipal quedó determinado que no se iba a proceder a donar ningún terreno porque con toda razón les iban a llover demandas de otros ámbitos”.

Tomé Seif subrayó que “cuando llueve se suspenden las actividades, por eso esto sería un avance importante en la oferta educativa que tiene la institución”.