Durante el recorrido en el micro de dos pisos, tras la llegada de la Selección, un grupo de jugadores tuvo un percance: Messi, De Paul, Paredes, Di María y Otamendi rozaron sus cabezas con unos cables que estaban a baja altura.

El primero en verlo fue el defensor, quien lanzó el grito y enseguida los demás se agacharon, esquivando el riesgo. Pero Paredes demoró unos segundos más y, si bien gambeteó el impacto, el cable le llevó la gorra. El volante de la Juventus se quedó contrariado por la prenda perdida, pero enseguida retomó la conversación con sus compañeros, como si nada hubiera ocurrido.

El riesgoso momento, afortunadamente, pasa a ser un recorte con cierto tinte de humor, pero la realidad es que podría haber terminado mal.

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Preocupados, numerosos usuarios de redes sociales no solo remarcaron que la situación podía haber opacado los festejos si los jugadores no lograban reaccionar como lo hicieron. Además, señalaron que Paredes tuvo que agarrar con la mano el cable para conseguir eludirlo, lo que sumó un riesgo adicional a la inesperada situación.

Un detalle para tener en cuenta para el histórico festejo que se viene este martes en Buenos Aires y el país entero. (Fuente: El Cordillerano)