Un vuelo de la aerolínea Avianca que se dirigía desde Lima, Perú, hasta Buenos Aires sufrió fuertes turbulencias durante la madrugada cuando cruzaba la Cordillera de los Andes. Nueve pasajeros resultaron heridos por los golpes, informaron fuentes aeroportuarias.

Desde la Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC), organismo dependiente del Ministerio de Transporte nacional, aseguraron a LA NACION que intervinieron en el tema y que van a hacer un informe.

Según un vocero del organismo, el avión pasó por una zona de "turbulencia moderada", ya que "fuerte" es cuando el piloto no puede controlar la aeronave. El vocero también informó que hubo nueve heridos leves.

De acuerdo a la misma fuente, el incidente se va a investigar y en 30 días se va a sacar un informe preliminar. En este momento se está recolectando la información meteorológica y las entrevistas que se hicieron a los tripulantes del avión.

"Hubo una turbulencia severa, como a las 2.30. El avión subió y descendió en tres oportunidades unos 200 o 300 metros", dijo al canal de noticias TN Stella Cuevas, una de las pasajeras que es médica y atendió a los heridos.

"Fue una experiencia horrible, pidieron médicos y los únicos disponibles éramos mi marido y yo. El avión no tenía botiquín, ni ningún tipo de guantes ni algodón, improvisamos algo con bolsas para hacer las veces de guantes, para asistir a los pasajeros", denunció.

"Los pasajeros padecieron en su mayoría lo que se llama efecto 'latigazo' ante los saltos del avión, también algunos con cortes menores, golpes y vómitos", explicó Cuevas.

Al llegar al aeropuerto metropolitano Jorge Newbery, los paramédicos ingresaron a la aeronave para asistir a los afectados, mientras que la médica aseguró que el aterrizaje y resto del viaje fue "normal". El incidente ocurrió en el vuelo 330 de Avianca que se dirigía desde la ciudad peruana de Lima a Buenos Aires.

El comunicado de Avianca

"El avión del vuelo AV965 que cubría la ruta Lima-Buenos Aires el 29 de mayo pasado experimentó turbulencia severa en la frontera entre Chile y Argentina. Siguiendo los protocolos establecidos, la tripulación continuó con el vuelo hasta el aeropuerto de Ezeiza donde el avión aterrizó sin inconvenientes. La tripulación y los pasajeros estuvieron en buen estado de salud, aunque algunos de ellos presentaron dolencias menores debido a la falta de uso de cinturón de seguridad, cuando la señal se encontraba encendida ya que la aeronave pasaba por zonas de turbulencia.

Cabe mencionar que el avión, siguiendo las regulaciones aeronáuticas, sí contaba con el respectivo kit médico, mismo que fue empleado para brindar las primeras atenciones a los pasajeros, quienes luego fueron atendidos por Sanidad en el aeropuerto de Buenos Aires.

Estos eventos climáticos son comunes en la ruta por lo que nuestras tripulaciones están preparadas para manejarlas. Invitamos a nuestros pasajeros a que por su seguridad utilicen el cinturón de seguridad cuando la tripulación lo solicite y mientras la señal se encuentre encendida".

Fuente: La Nación