El conductor argentino utiliza cada vez menos el automóvil, ya que desde 2012 se acumula una pérdida de más de 2.500 kilómetros promedio al año, fenómeno que se explica por el aumento del precio de los combustibles y la existencia de más hogares con un segundo vehículo.

Así se desprende de un estudio realizado por la consultora internacional GIPA, dedicada a los actores del mercado de la posventa, en el que se analizaron las preferencias de los consumidores argentinos y su vinculación con el mantenimiento vehicular.

"Hay una tendencia desde el 2012 a la baja en la cantidad de kilómetros, marcada especialmente en los últimos años", expresó el informe suscripto por la directora general para la región de GIPA, Florencia Delucchi, en el que se precisó que la media anual del parque automotor argentino es de 12.322 kilómetros.