Un hombre con pedido de captura internacional por no pagar la cuota alimentaria de su hija discapacitada fue extraditado desde México y quedó alojado en una unidad carcelaria de Villa María. El hecho es considerado "muy poco frecuente" por fuentes judiciales.

Félix Girola, ingeniero de 46 años, fue detenido en México, donde trabajaba. La captura internacional fue tramitada ante el Juzgado de Control de Bell Ville a solicitud del fiscal de Instrucción Oscar Aliaga.

El hombre -oriundo de Bell Ville- está imputado por el delito de "incumplimiento de los deberes de asistencia familiar, en perjuicio de su hija discapacitada menor de edad". La pena prevista tiene un máximo de tres años de prisión ya que la condición de la hija es un "agravante".

La extradición -que llevó 13 años- se desarrolló con la intervención coordinada del Ministerio Público Fiscal de Córdoba, Cancillería, Interpol y el Juzgado de Control de Bell Ville.

Durante años Girola no cumple con la cuota alimentaria con su hija que sufre un retraso mental y requiere rehabilitación. El arresto se fundamentó "por peligrosidad procesal" y en los próximos días se le tomará indagatoria.

En 1997 Girola se casó con Zulma Bianco, a quien abandonó en el 2000 cuando ella estaba embarazada de seis meses. Se fue a México y regresó tres años después para tramitar el divorcio. Nunca le había pasado dinero, pero en 2003 se fija la cuota alimentaria que paga dos meses. Regresa a México y no cumple más.

En 2004 Bianco lo denunció pero sólo sabía que estaba en México, no podía ubicarlo. La justicia le fija una cuota a los abuelos paternos, jubilados. Recién en 2011 dan con Girola, quien trabajaba empresa consultora del sector petrolero. Se iniciaron los trámites para que se presentara en la justicia y en 2014 la empresa avisó que ya no trabajaba.

El Tribunal Superior de México hizo lugar al pedido de extradición en 2014, Girola contacta a su ex esposa y le pasó dinero unos meses. En de mayo de 2015 lo detuvo la Interpol pero salió porque sus abogados consiguieron la libertad hasta que quedara firme la sentencia.

Desde la fiscalía que interviene en el caso aseguran que "en muchas oportunidades" -durante todos estos años- a la madre se le complicó poder comprar los medicamentos para la hija.

Fuente: La Nación