Pero la reglamentación también exige que, además de este elemento, los menores deben viajar en las plazas traseras del vehículo.

¿Qué sucede entonces cuando un niño viaja en una pickup cabina simple o en vehículo biplaza?

En una situación como esa, no sólo se considera infracción sino que se trata de una "falta grave", de acuerdo con la explicación que dan desde la Agencia Nacional de Seguridad Vial.

Desde la entidad ratifican el artículo 77 de la Ley 24.449, que establece como falta grave "la conducción de vehículos transportando menores de diez (10) años en una ubicación distinta a la parte trasera".

Esta situación se aplica a cualquier vehículo que no tenga plazas traseras. Ni siquiera se contempla a aquellos modelos biplaza, como una cupé que tenga en el asiento del acompañante los elementos necesarios para transportar una sillita infantil, como los ganchos de fijación isofix y la posibilidad de desconectar el airbag del acompañante.

En España

En este país se permite el uso de un SRI en asientos delanteros. Inclusive hay marcas de sillitas infantiles que no ven impedimentos para instalarlas en sentido contrario a la marcha en algunos casos en la plaza del acompañante.

Desde la ANSV reconocen que "España así lo permite, pero sólo en casos excepcionales. No obstante, la Dirección General de Tráfico española resaltó que numerosas investigaciones destacan los beneficios de que los niños viajen en los asientos traseros de los vehículos para así reforzar su protección".

Una sillita infantil reduce en un 70% los riesgos de lesiones graves o fatales ante un incidente vial. En varias oportunidades y ante siniestros con desenlaces fatales, los más pequeños han salvado su vida por estar correctamente sujetados al SRI.

A pesar de ello, un estudio observacional de la ANSV sobre el comportamiento de los conductores en nuestro país realizado en 2018, señala que solo el 26% lleva a sus hijos menores de 10 años con la sillita de seguridad.

Hay varios estudios que fundamentan esta decisión de prohibir que menores viajen en alguna otra plaza que sea la trasera.

El riesgo de muerte en menores de 4 años que viajaban en un auto accidentado se duplicaba si lo hacían en el asiento de delante y cuatro veces más si se trataba de menores de 1 año, concluyó una investigación australiana.

En la ANSV sostienen que los niños deben ir siempre en los asientos traseros y sujetados con el SRI correspondiente, según su peso y tamaño. Además, se recomienda que los pequeños de menos de 9 kilos sean colocados mirando hacia atrás (sentido contrario a la marcha) y en posición central del vehículo.

Nunca deben ir en los brazos de los padres ni compartiendo el cinturón de seguridad.