La explosión en la fábrica de fulminantes de la localidad de Miramar de Ansenuza, además de la muerte de un trabajador provocó daños en inmuebles ubicados a su alrededor debido a la onda expansiva: “Hay vidrios rotos, estamos viendo qué otros daños se produjeron”, indicó una fuente judicial.

Además hay otra persona herida, aunque su estado no sería de gravedad.

Hasta el momento se conoce que el operario fallecido tenía 42 años y fue identificado como Marcelo Adrián Druetta.

El estallido ocurrió alrededor de las 6.30 y provino de un secadero de pólvora perteneciente al polvorín Imáz, de esta localidad, propiedad del intendente Adrián Walker y ubicada en calle General Paz al 200.

Esta fábrica, según explica en su página web, ofrece al mercado fulminantes, explosivos que sirven para el lanzamiento de proyectiles a través de escopetas y pistolas.

En el lugar ya trabaja Policía Judicial para determinar las causas de la exposición mediante peritajes. Alrededor de la planta se procedió a crear un perímetro de seguridad para resguardar la zona afectada.