Una niña de dos años debió ser internada en las últimas horas en un centro de salud de la ciudad de Córdoba luego de sufrir un cuadro de Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) tras comer empanadas árabes. La pequeña, oriunda de la localidad de Villa Quilino (departamento Ischilín), presenta una evolución favorable. .

"Se encuentra favorable en su estado de salud", informó CBA24N, según el parte médico. 

La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) señala que el SUH "es la primera causa de insuficiencia renal aguda (los riñones no funcionan) en los niños menores de 5 años y la segunda causa por la cual los chicos requieren un trasplante renal".

Por ello es importante evitar el consumo de carne poco cocida, principalmente picada, y prestar sumo cuidado en la ingesta de otros alimentos detallados abajo, en menores de 5 años.


Qué es el Síndrome Urémico Hemolítico
El Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) es una enfermedad grave, caracterizada por daño agudo de los riñones, asociado a alteraciones en las células de la sangre: trombocitopenia (reducción de plaquetas, necesarias para formar los coágulos) y anemia (causada por ruptura anormal de glóbulos rojos).

Pueden asociarse vómitos, irritabilidad y, en algunos casos, convulsiones (como parte de un compromiso neurológico de grado variable). Siempre requiere hospitalización y puede llevar a la muerte.

Este cuadro es precedido por síntomas digestivos que se presentan durante la semana previa (diarrea o diarrea con sangre).

¿Qué alimentos pueden estar contaminados con esta bacteria?
Carne:
La bacteria puede encontrarse en la superficie de la carne cruda y sus jugos, y de la carne picada y alimentos preparados con ella como hamburguesas, albóndigas, arrollados de carne, salame, y chorizos.

Frutas y verduras: Lechuga, repollo, espinacas, coles, brotes de soja y alfalfa y otros vegetales que se consumen crudos. Frutas sin lavar en especial las rastreras.

Leche sin pasteurizar y los productos lácteos elaborados a partir de ella, en especial los quesos blandos poco estacionados.

Alimentos cocidos y listos para consumir: La bacteria puede encontrarse en la superficie de cualquier alimento debido a su contaminación a través de las manos de quien lo prepara o consume, de utensilios o de alimentos crudos contaminados (ver contaminación cruzada).

El agua utilizada para beber y cocinar puede estar contaminada con STEC, cuando no proviene de una red y no recibe un tratamiento adecuado o las conexiones no son seguras.

¿Qué medidas de prevención pueden adoptarse?

Cociná completamente las carnes, especialmente las preparaciones con carne picada (hamburguesas, albóndigas, pastel de carne).

Para saber cuándo la cocción es completa: observá que no haya zonas rosadas en el interior y que los jugos sean claros. El color tiene que ser homogéneo, en especial en las preparaciones con carne picada.

La carne picada es un alimento que presenta este riesgo, pero si la cocinamos completamente es un producto seguro para consumir. Recordá que la cocción es la única medida que elimina a la STEC en el caso de estar presente en un alimento.

Las carnes congeladas pueden cocinarse directamente cuando son piezas chicas, pero debe asegurarse su cocción completa

Lavá

Lavate las manos con abundante agua segura y jabón:

Antes, durante y después de preparar alimentos (en especial después de tocar carne cruda).

Antes de preparar mamaderas y al alimentar al bebé.

Luego de ir al baño, acompañar al niño al baño y después de cambiar pañales.

Después de jugar o trabajar con animales.

Lavá cuidadosamente frutas y verduras.

Lavá minuciosamente, hoja por hoja y bajo el chorro de agua segura los vegetales de hoja verde (lechuga,espinaca, repollo, puerro)

Lavá minuciosamente las frutos que crecen en contacto con el suelo.

Lavá las frutas, aunque luego vayas a pelarlas.

Lavá las verduras trozadas en bandejitas antes de consumirlas, especialmente las que se comen crudas

Lavá con abundante agua y detergente las tablas y utensilios que usaste para la carne cruda.

Mantené limpios esponjas y trapos.

Mantené las superficies limpias y desinfectadas.

Usá agua segura

Usá agua segura para beber y cocinar, lavar utensilios y recipientes utilizados en la preparación de alimentos.

Si tenés dudas sobre la inocuidad del agua para beber, hervila durante 5 minutos o agregale dos gotas de lavandina por cada litro de agua. Conservala en recipiente estéril, con tapa.

Separá

Mantené las carnes crudas separadas de los alimentos cocidos y los listos para consumir.

Al hacer las compras, separá la carne cruda del resto de los alimentos. Mantenela en bolsas herméticas, para evitar derrames de sus jugos.

En la heladera, guardá las carnes en recipientes herméticos en los estantes inferiores. Colocá los alimentos que ya están cocidos y los listos para consumir en los estantes superiores.

Al preparar los alimentos, utilizá diferentes tablas para picar y cortar carnes crudas, verduras y alimentos listos para consumir.

Al servir la comida, utilizá fuentes, platos y utensilios que estén limpios. No utilices los mismos que usaste para carne cruda o verduras sin lavar.

Mantené la cadena de frío

Comprá alimentos en comercios que mantengan condiciones de higiene y que conserven los productos perecederos a temperaturas de refrigeración/congelación.

Guardá rápidamente los alimentos perecederos en la heladera/freezer luego de su compra

No descongeles a temperatura ambiente. Hacelo en la heladera o microondas.

Mantené las viandas a temperatura de refrigeración hasta el momento de su consumo.

Otras prácticas seguras para cuidar a los niños

Utilizá en sus comidas leche, quesos y jugos pasteurizados.

No cambies el pañal del bebé en las superficies donde se preparan o consumen alimentos.

Eliminá los pañales y excrementos humanos dentro de una bolsa cerrada, en un recipiente exclusivo. Es importante que los niños no tengan acceso al recipiente donde se desechan los pañales.

No lleves a los niños a la guardería o jardín, si tienen diarrea. Consultá al centro de salud y volvé a llevarlos al tener el alta.

Evitá que niños con diarrea jueguen o se bañen en piletas o piletines con otros niños, aún con los pañales colocados.

Asegurate de que los niños jueguen en piletas cloradas adecuadamente. Evitá que se bañen en zanjas o canales que puedan estar contaminados.

Si concurrís a exposiciones que permiten el contacto directo del púbIico con animales (tales como ferias ganaderas, exhibiciones agropecuarias y jardines zoológicos) lavales frecuentemente las manos y evitá que consuman alimentos durante el paseo.

Si el niño tiene diarrea con sangre o cualquiera de los síntomas descritos, recordá consultar inmediatamente al centro de salud o al hospital.

No deben usarse aguas residuales para regar los cultivos, bañarse, ni para dar de beber en el hogar y ni a los animales.

Fuente: www.argentina.gob.ar/anmat