Un operativo con gran despliegue policial se llevó a cabo este martes en la ciudad de Frontera, relacionado al robo de maíz ocurrido el pasado viernes luego de que se detenga un tren sobre la vía y varias personas aprovecharan para abrir los vagones y retirar el cereal. Estuvo a cargo del personal policial de la Comisaria de Frontera e intervinieron grupos de irrupción, del Comando Radioeléctrico y de la Subcomisaría de Josefina. 

Fuentes cercanas a la investigación informaron a El Periódico que se realizaron nueve allanamientos y que se pudo dar con varias de las personas que en esa jornada fueron identificadas cuando se llevaban el maíz, las cuales -al menos diez- fueron imputadas de acuerdo a su participación y cuya situación procesal se resolverá en estos días.

Por otra parte, los uniformados pudieron recuperar una buena cantidad del maíz sustraído que se encontraba en graneles y contenedores. También se secuestraron cinco vehículos: tres camionetas (dos Ford F-100, una Chevrolet S-10 doble cabina) y dos autos  (un Chevrolet Corsa y un Citroën C4) que habían sido filmados en la escena del saqueo la semana pasada.

Cabe recordar que un tren del servicio que presta la empresa Belgrano Cargas, que desde San Francisco se dirigía a Rosario transportando maíz, fue saqueado por distintos grupos de personas que se hallaban en el sector límite de ambas provincias.

Se trató del segundo saqueo de cargas granarias casi en la misma zona en un lapso de apenas una semana y en esta última oportunidad se habrían llevado, según fuentes extraoficiales, unos 150.000 kilos del cereal.

Los hechos se desencadenaron alrededor de las 17, cuando un desperfecto mecánico obligó al maquinista del convoy a detener la marcha, a la altura del barrio San Javier de la ciudad de Frontera. Ante esa detención comenzó a acercarse este grupo de vecinos que, según los testigos, abrieron fácilmente las boquillas de los vagones para llevarse la producción que era transportada hacia el puerto rosarino.

Imputaciones

Según trascendió fueron saqueados cinco vagones de la formación. Entre los mayores que se apoderaron del maíz a granel había muchos menores colaborando.

Si bien hasta el momento no fue determinada la cantidad de imputados, desde la investigación informaron que las mismas varías porque algunos tienen la caratula de “hurto calamitoso” mientras que otros, quienes tenían maíz en su poder, pero no fueron detectados en la escena del hecho se los imputó de “encubrimiento por receptación”.

El hecho es investigado por el fiscal de Frontera, Nicolás Stegmayer.