Durante los feriados largos de este 2013 hubo significativos golpes delictivos que tuvieron como víctimas a comerciantes de la ciudad. Los primeros y más resonantes fueron los detectados el lunes 11 de febrero, en plena celebración por el Carnaval, donde una misma banda, mediante boquetes, actuó en la joyería Merry y en el local de venta de neumáticos Terraf. De ambos lugares se llevaron un suculento botín.

En esa oportunidad, se conoció que hubo menos policías en la ciudad, ya que efectivos de la departamental San Justo estuvieron cumpliendo tareas en distintos corsos de la zona, en el partido entre Belgrano y River jugado en Córdoba y hasta en el Cosquín Rock. A esto debe sumársele que hay varios efectivos policiales con carpeta médica.

La situación generó un clima raro en la ciudad porque ambos golpes se dieron en pleno microcentro, donde nadie habría visto nada.

Ante este escenario, el nuevo jefe de la Policía Departamental San Justo, Félix Quinteros, decidió sacar más agentes a la calle. No se engrosó el número de personal sino que algunos de los que cumplían tareas administrativas fueron enviados a patrullar. Por eso, en el último tiempo es notoria la presencia policial durante los días de semana en los bulevares 25 de Mayo  y 9 de Julio, cuando existe actividad comercial.

Se repite un feriado

El último fin de semana largo por el súper feriado de Pascuas y Malvinas, delincuentes volvieron a dar un nuevo golpe. Esta vez fue en el Paseo Colón, en un local de venta de teléfonos celulares. Se llevaron unos 15 equipos y una computadora.

Fue Adrián, el propietario del negocio de la firma Claro, quien se encontró el miércoles a la mañana con lo sucedido. “La puerta de vidrio estaba intacta, solo forzaron la cerradura”, comentó el dueño del local a El Periódico, quien mostró su impotencia ante el hecho: “Estamos en pleno microcentro, a pocas cuadras de la central policial, pero nadie aparentemente vio nada”, dijo.

El robo se produjo en momentos en que estuvo cerrado el local ante el feriado. Según la víctima “todo lo sustraído lo hemos valuado en 40 mil pesos, entre los teléfonos robados había al menos cinco de los considerados de alta gama”.

Por los robos a la joyería y al local de neumáticos no hubo detenidos (los que hubo en primera instancia estaban relacionados a otros hechos similares). Por este último, la Policía ya habría identificado a alguno de los autores.