En la jerga policial se le llama ratero a un ladrón que sustrae elementos de poco valor. El problema es cuando esa persona ya se transforma en un habitué de los robos y cada dos por tres termina detenido causando amarguras a más de una familia de nuestra ciudad. Y es lo que pasó este miércoles con la detención de un hombre de 30 años que fue detenido luego de robar elementos de grifería de una vivienda de calle Liniers al 800, según informaron fuentes de la Departamental San Justo.

Este delincuente, ya conocido en el ambiente policial, había estado detenido el fin de semana también por otro robo menor y salido en libertad esta semana.  

En esta oportunidad en la tarde de este miércoles, este individuo cuyo apellido sería Ñáñez, fue observado por personal de Bici Policías cuando saltaba al exterior desde una reja de una vivienda en calle Liniers al 800.

Llevaba en una bolsa distintos elementos de grifería sustraídos de la casa mencionada.

Los agentes procedieron a su detención y momentos más tarde la propietaria del domiclio, una mujer de 60 años, reconoció los elementos robados como propios.