El cabo primero Juan Matamoro contó que alrededor de las 17.30 de ayer, cuando estaba junto al agente Víctor Quiroga,  entró una llamada al 101 “informando que había una bebé que había caído en un pozo negro”.

“Con premura nos llegamos,  constatamos que la criatura estaba en el pozo más o menos a unos dos metros de profundidad, con su cabeza casi inmersa en la materia fecal”, dijo  a Mitre Córdoba.

“No pensé en ningún otro riesgo que únicamente rescatarla,  pedí que me agarraran las piernas, me introduje cabeza abajo. Le alcance a tomar un bracito y así pudimos sacarla del pozo”, agregó.

La nena fue derivada hasta el Hospital de Niños, donde se encuentra internada “en observación por la inmersión, aunque su estado no reviste gravedad”, señalaron fuentes policiales. Se encuentra en una sala común recuperándose satisfactoriamente.

El hecho ocurrió en una vivienda de Colectora Sur y Perú de barrio Villa Los Artesanos.