Cortés, galante y muy correcto en sus modales. Las mismas características que describen al estudiante ejemplar en la famosa canción de Los Twist se aplican a un peligroso violador prófugo detenido este jueves en nuestra ciudad, donde habría estado viviendo desde hacía un año tras escaparse de una cárcel porteña. Se trata de Blas Abate, un hombre de 57 años que según la información policial registraba al menos dos condenas -12 años de prisión- por violaciones reiteradas a tres niños.

Si bien era oriundo de Buenos Aires, en San Francisco Abate tenía parientes y se ganaba la vida limpiando y manteniendo piletas, por lo que en esa actividad podía tener acceso a casas de familia o clubes donde podía contactar con niños, lo que lo hacía más peligroso aún. Si bien residía en la zona de la UTN, fue detenido en pleno centro, en la calle, en las proximidades del domicilio de uno de sus familiares. Se había fugado de una prisión de Buenos Aires hacía más de un año.

Tras recibir el alerta de captura, que lo vinculaba a nuestra ciudad, los agentes de la División Investigaciones de la Policía venían siguiendo pistas para detectarlo desde hacía tres semanas. La búsqueda era intensa por su peligrosidad. Con los primeros datos, muy someros, obtenidos de investigadores de un tribunal de Buenos Aires, los efectivos policiales realizaron algunos seguimientos y filmaciones.

“Teníamos la urgencia de capturarlo porque era alguien muy peligroso y que en su trabajo podía tener acceso a niños. Estaba muy bien presentado y parecía muy correcto, es parte de su perfil psicológico”, señaló a El Periódico el comisario Leonardo Ybarra, a cargo de la investigación. Ybarra resaltó además que no se trataba de alguien sospechado, sino de una persona ya condenada y con un perfil reincidente.

Celulares

B.A. se movía en un Ford Escort y a través de las sábanas telefónicas y el rastreo de llamadas por las antenas de celulares los agentes policiales fueron siguiendo sus rastros hasta su detención. “Las llamadas nos indicaban siempre una zona determinada y así lo cercamos”, precisó Ybarra. Los investigadores estiman que vivía en San Francisco desde hacía un año, aproximadamente. Hasta que, finalmente, fue capturado este jueves para devolverlo a la cárcel.

OPERATIVO SILENCIOSO

El abusador fue detenido el jueves poco después del mediodía en plena vía pública, en 25 de Mayo a la altura del 2700. Los policías que participaron del operativo actuaron mayormente de civil, ya que al saber que pesaba sobre él un pedido de captura y advertir que lo estaban siguiendo, el hombre podía darse a la fuga. Tal es así, que vecinos y comerciantes del lugar que fueron consultados por este medio ni siquiera estaban enterados ni habían advertido la presencia policial