Este viernes continuará el juicio contra Gerardo Gette, el hombre acusado de matar al ginecólogo Daniel Casermeiro en diciembre de 2019.

Durante la segunda jornada se espera que declare alrededor de una decena de testigos, que serán escuchados por el tribunal, conformado por Guillermo RabinoAlejandro Acuña María Teresa Garay, y los jurados populares. Además, siguen el proceso la fiscal de Cámara, Consuelo Aliaga Díaz, y el abogado defensor de Gette, Héctor Flores.

Hasta el momento, declararon nueve testigos. Quien no lo hizo fue el propio Gette, que se limitó a negar los hechos que se le atribuyen.

Entre los testimonios de ayer, estuvo el de la esposa de Casermeiro, María del Valle Peretti, que pidió no declarar frente al acusado. La mujer dejó en claro que su esposo y Gette solían reunirse en su casa aunque lo hacían en privado. Además, comentó que su marido era muy reservado, por lo que si bien sabía que hablaban de negocios, no sabía de cuáles. Peretti recordó que poco tiempo antes de la muerte del doctor, ambos habían viajado a Brasil para "gestionar" un departamento en Camboriú” y que tras ello las reuniones se habían intensificado entre ellos.

También declaró Diego Casermeiro, uno de los hijos de la víctima, que también mencionó ese departamento. El hijo dijo que el departamento era de su papá, pero que no lo quería ya que no le era rentable. Y le contó que Gette le había conseguido un comprador.

Alguno de los testimonios más interesantes fueron las de Sergio De Bonis y Fernando Daniele, de la División Investigaciones de la Policía, que plantearon dos contradicciones principales de Gette entre la prueba recolectada y sus declaraciones en calidad de testigo, cuando aun no era sospechoso. Una de ellas son las cámaras de seguridad que muestran al imputado y Casermeiro irse juntos de la clínica cerca de las 10 y a Gette regresando solo a su auto alrededor de las 18, cuando Gette declaró que se había ido solo. Otra, es que según Gette el encuentro entre ambos había sido para ponerse de acuerdo para desocupar sillas de un galpón que sería alquilado, cuando las pruebas mostraron que el galpón se encontraba vacío.

También declaró Claudia Ricci, concubina de Gerardo Gette cuando se registró el hecho. La mujer indicó que el día de la desaparición, su pareja se había ido de viaje a María Juana y había regresado cerca de las 18. 

A la vez atestiguó Daniel Tita, médico amigo de Casermeiro. Sobre el día en que presuntamente fue asesinado el médico, Tita dijo que habían quedado en tomar un café al mediodía pero Daniel no apareció y que le canceló los planes cerca del mediodía. Aseguró que lo notó ofuscado o molesto. 

Por su parte Omar Verra, quien tenía un negocio en común con Casermeiro por la venta de una casa, contó que el médico le mandó un audio el día de su desaparición a las 13 diciéndole que iba a ir a las 16, en relación al negocio de venta de una casa de Verra. Dijo que lo notó agitado, ansioso. Que a las 15.50 lo llamó para decirle que necesitaban cerrar el negocio. También recordó a Gette, ya que días atrás había ido a ver un departamento de parte de Casermeiro, quien le había dicho que un amigo iría a verlo para comprarlo. A Gette le mostró el departamento el hijo, por ende no lo conocían, pero lo identificaron después de la desaparición.

A su vez, también prestó declaración Silvina Paveglio, escribana que declaró ser quien intervino en la certificación de la firma de un instrumento de cesión de derechos de un inmueble, que sería el departamento de Brasil, de Daniel Casermeiro a Gerardo Gette. La mujer indicó que parecía un trámite que se realizaba en un marco de confianza.

Por último Rubén Pasero, cercano a Casermeiro, contó que también solía recurrir a Gette para realizar negocios. Fue quien contó que Gette le acercó a Casermeiro el negocio del departamento de Camboriú y que en marzo de 2019 los tres viajaron a verlo. Sin embargo, al médico no le agradó y quiso alejarse del negocio. Tras ello, Gette le dijo que el doctor quería vender el departamento y, poco después, que él se lo había comprado. Como el médico ya había pagado unos 100 mil dólares por el inmueble, Pasero le preguntó cómo iba a pagarlo y Gette le dijo "despreocúpate" y que Casermeiro le había dado "facilidades" para el pago.

El caso

Gerardo Gette (60) está siendo juzgado desde este jueves 10 de noviembre por el atroz homicidio del médico ginecólogo Daniel Casermeiro (61) en diciembre de 2019 en la zona rural camino a Luxardo.

La Fiscalía de Delitos Complejos, a cargo de Bernardo Alberione, fue la encargada de la investigación, la cual determinó que el móvil del asesinato habría sido económico, ya que Gette habría tenido una deuda con Casermeiro.

Para la fiscalía, el imputado primero lo mató en un campo cercano a Estación Luxardo, después abandonó el auto perteneciente al médico en un maizal sobre la Ruta 1 y luego regresó caminando a San Francisco.

A tres años del homicidio, no hay rastros del arma usada para la ejecución ni del teléfono celular del ginecólogo.