La Fiscalía de Instrucción de Morteros, a cargo de Yamila Di Tocco, dictó la prisión preventiva de los imputados Ezequiel Matías Simeone, Cristian Hernán Varela y Rocío Milagros Rauch por los hechos de abuso sexual seguido de muerte de Aralí, ocurrido a comienzos de noviembre en la localidad de Brinkmann.

Según fuentes judiciales así quedaron las imputaciones de los detenidos:

-Ezequiel Matías Simeone, pareja de la madre de la víctima: por supuesto coautor de los delitos de Abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, por ser cometido contra un menor de 18 años de edad aprovechando la situación de convivencia preexistente con el mismo, y por ser cometido por dos o más personas -reiterado- y de Homicidio calificado por el vínculo, por mediar violencia de género y criminis causa, en concurso real, y como probable autor del delito de Incendio, todo en concurso real.

-Cristian Hernán Varela: como supuesto coautor responsable de los delitos de Abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, por ser cometido contra un menor de 18 años de edad aprovechando la situación de convivencia preexistente con el mismo, y por ser cometido por dos o más personas -reiterado- y de Homicidio calificado por el vínculo, por mediar violencia de género y criminis causa, en concurso real.

-Rocío Milagros Rauch (madre de Aralí): por supuesta participe necesaria penalmente responsable de los delitos de Abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, por ser cometido contra un menor de 18 años de edad aprovechando la situación de convivencia preexistente con el mismo, y por ser cometido por dos o más personas -reiterado- y de Homicidio calificado por el vínculo, por mediar violencia de género y criminis causa, todo en concurso real.

Investigación

El 2 de noviembre en Brinkmann, Aralí fue asesinada dentro de la vivienda que compartía con Simeone, su mamá y hermanos más chicos.

Ese día el inmueble se incendió, ulteriormente con las pericias se pudo conocer que fue quemado intencionalmente para encubrir el crimen de la nena. La autopsia reveló que no hallaron monóxido de carbono en sus pulmones y que presentaba “un traumatismo en la zona craneal”. Además, la nena presentaba signos de abuso sexual.