“Hay una bajada de línea del Gobierno nacional para atacar a los sindicatos”

Oscar Damia y Julián Guevara encabezan la nueva comisión del Sindicato Regional de Luz y Fuerza, que asumió a principio de mes tras las elecciones del 25 de julio último. Es la misma línea de Juan Manuel Almada, a quien suceden. El primero como secretario seccional y el segundo como subsecretario.

“El desafío que tenemos por delante es grande porque Juan Manuel dejó la vara alta, hizo una gran gestión y debemos continuar lo que empezó. Nuestra idea es seguir su filosofía, que es estar cerca del afiliado, contenerlo, aconsejarlo en estos momentos duros”, expresó Damia, quien remarcó: “Estamos en el reguardo de la fuente laboral, sabemos los problemas que tiene la empresa (por Epec), entonces es un conjunto de cosas que en momentos complicados como en los que vivimos hay que saber cómo manejarse, por eso defendemos a muerte nuestro convenio colectivo de trabajo”.

Al ser consultado sobre el proceso de eficientización encarado tiempo atrás por Epec que, en algunos de sus apartados, choca con ventajas que el sindicato ha obtenido a través de un convenio colectivo de trabajo que data de 1975, Damia respondió: “Hasta el momento hay un acta acuerdo donde se tocaron pocos artículos y nada más, que es provisorio. Nuestro convenio colectivo sigue vigente y apostamos a eso”.

Tras ello, el dirigente gremial consideró que el Sindicato Regional de Luz y Fuerza es un “gremio negociador”, de “puertas abiertas y dispuestos al diálogo”, pese a los contratiempos con la empresa.

El apoyo a Fernández y la persecución

La cúpula del gremio ratificó su apoyo a la fórmula Alberto Fernández y Cristina Fernández, quienes en las Paso de agosto obtuvieron un categórico triunfo ante Mauricio Macri, previo a las primarias de octubre.

“Consideramos que es lo mejor para los empleados, para el país en general. No estábamos de acuerdo en muchas cosas con Mauricio Macri. Ahora esperamos las generales donde vamos a trabajar en el mismo sentido. La situación es muy complicada en todos los ámbitos, será difícil salir a corto plazo”, reflexionaron.

Tras ello, Damia se refirió al papel del sindicalismo y a lo que considera una “bajada de línea” del Gobierno nacional hacia ellos: “El sindicalismo argentino no está bien visto o ha pasado a estar mal visto. Claro que hay sindicalistas que colaboraron para eso, pero hay otros que tienen buenas intenciones y hacen bien las cosas”. Asimismo, señaló que hoy está de moda “pegarle al sindicalismo” y apuntó al Gobierno: “Hay una bajada de línea del gobierno nacional para atacar a todos los sindicatos. Han prometido meterse con los convenios colectivos de trabajo, las reformas laboral y previsional. Para ello hubo maniobras para desprestigiar el sindicalismo argentino que es único en el mundo, que al trabajador le ha hecho bien y no creemos ser los males de lo que pasa en el país”.

Lo social como bandera

A su turno, Guevara indicó que el gremio cumple una importante función social: “Hace cuatro años empezamos a hacer colectas ante estos desbarajustes del país, lo recolectado lo llevamos a los merenderos, la idea es hacerlo todos los meses”.

En materia de servicios nuevos para los 140 afiliados, se encuentran en tratativas para que en la sede se puedan hacer atenciones en kinesiología y hasta se busca el inicio de clases de gimnasia a través de un profesor de educación física.

Siguiendo con las iniciativas, el subsecretario seccional habló de que apuestan a la capacitación con diferentes cursos, entre ellos uno importante, el de electricista matriculado en sus diferentes niveles. “No solo son para afiliados sino para toda la comunidad”, valoró.

A todo ello se le suman sorteos mensuales para otorgar presentes a los afiliados y obsequios en los cumpleaños; la facilidad de préstamos para la vivienda y personales; una obra social a la que consideran “solidaria” y ofertas de destinos turísticos en vacaciones, entre otras cosas.