Como en una escena de novela de suspenso todas las noches un guardia de seguridad recorre el ferrocarril Belgrano y siguiendo la luz de la linterna a su lado siempre hay un perro fiel que le cuida la espalda.

Esa es un poco la historia de Franco Peiretti, un joven de San Francisco que trabaja en este lugar y rubro hace cinco años. Sus laderos son una banda de animales que se quedaron a vivir en la estación y a los que un día empezó a alimentar y cuidar de forma sostenida.

Todo empezó hace cuatro años, los perros llegaron antes que él, pero fue con Franco que lograron una conexión familiar. La leyenda dice que el primero en aparecer fue “El Negro”, pero eso da igual porque a él se sumaron “Tóxica”, “Wachudo” y “Cabezón”, en el último tiempo se mudaron “Luli” y Manchita”.  

Con solo mirarlos supo definirlos: “Cuando llegué ellos ya eran los dueños del lugar, ellos son los jefes de la estación”.

“Manchitas” fue rescatada de la basura y ahora vive en la estación.
“Manchitas” fue rescatada de la basura y ahora vive en la estación.

Gatos también

No solo hay perros en el “ferro”, también hay un grupo de seis o siete gatos que saben que ahí hay un lugar para comer. Pese a que no son tan compañeros porque tienen resquemor a la noche ellos también lo esperan mientras hace las rondas.

“Acá están Claudia Alfonsa, Edelsio y fue corriéndose la voz en su conventillo así que son a veces siete. Con los gatos es más complicado hacer amistad, pero con tres ya tenemos confianza”, señaló a El Periódico.

Como no se acercan mucho es difícil dejarles la comida los días que no está así que ellos tienen una rutina diferente, en cambio los perros se arreglan con los compañeros de Franco que tienen esta tarea.

“La guardia es de 24 horas, yo estoy a la noche y cuando tengo varios días de franco les escribo para que entren las cuchas, se fijen si tienen agua y si pasa algo con alguno me llaman. Así pasó con Tóxica cuando le amputaron la pata por un accidente con el tren, yo salgo a la hora que sea por ellos”, aseguró.

Los gatos también han encontrado un lugar en la estación.
Los gatos también han encontrado un lugar en la estación.

Hogar

Para todos estos animales el ferrocarril es su hogar, a lo mejor en algún momento tuvieron uno más convencional. Esa teoría la sostiene Franco principalmente porque varios de ellos son perros de raza.

“Algunos chicos que manejan los trenes quisieron adaptarlos, pero son animales que llevan muchos años acá. Por ahí no se adaptan al lugar que les ofrecen porque escuchan el tren y se vienen. Yo creo que en algún momento tuvieron un hogar, son de raza hay pointer, labrador, ovejero”, aclaró.

Todos se adaptaron muy bien y son famosos porque salen por el barrio a buscar más comida y también por las fotos de Instagram. Casi todos los días hay una historia o un post de Franco que muestra cómo es su vida en el Belgrano.

La interacción con la gente les permite saber que cada uno tiene una historia de dolor lamentablemente. Tóxica por ejemplo sufrió el accidente, en el caso de Manchita llegó hace poco después de que la rescató en el invierno.

“A ella la encontré de noche en invierno, dormía en una montaña de basura y la cargué, saltamos el vagón y se adaptó a los chicos. Todos tienen sus cuchas adentro, calefacción y para el verano tienen ventilador”, explicó.

"Wachudo" y "Tóxica" hace mucho que están viviendo en el ferrocarril.
"Wachudo" y "Tóxica" hace mucho que están viviendo en el ferrocarril.

Todo al día

Vacunas, esterilización si se requiere, alimento, atención veterinaria, todo es cubierto por Franco que los cuida como a nadie.

Cada vez que su alcancía digital está por vaciarse vuelve a hacer un llamado a la solidaridad: “El dinero para el balanceado se hace donando a través de una cuenta. Me ayuda ‘Dame la Pata’ para difundir. Todos aportan su granito y aunque sea poco todo sirve porque el balanceado y medicamentos de animales están muy caro”.

La gente ya lo conoce y logra juntar bastante para cubrir el alimento de perros y gatos, privilegia que sea de la mejor calidad posible para que no falten nutrientes. A veces postea fotos donde vienen del veterinario o de bañarse.

"El Negro" es otro integrante de esta familia.
"El Negro" es otro integrante de esta familia.

Conciencia

Franco además es un proteccionista, siempre intenta generar conciencia de la importancia de castrar y también de ser un tenedor responsable de las mascotas.

En este aspecto dijo: “El abandono es algo que me molesta mucho. Si no tenés trabajo o recursos para darle de comer, llevarlo al veterinario, cortarle el pelo entonces es mejor no tenerlos”. Varias veces discutió con personas porque él optó por llevarlos a cortar el pelo, bañarlos o vacunarlos ya que sus familias no lo hacen.  

Por último, instó a que “las personas se informen más” y resaltó: “Muchos no saben que se castra gratis en el Honguito del Parque Cincuentenario o que con una cuota pueden ayudar a las instituciones que pagan las guarderías y ayudan en hogares de tránsito de las mascotas”.

A esta altura de la nota los perros ya se fueron a hacer sus propias actividades, ellos van y viene. Lo mismo que Franco que los deja unos días nada más mientras descansa.