Se inauguró en Devoto la primera iglesia en honor al santo Cura Brochero

Se inauguró esta semana en el sector sur de Devoto, la nueva iglesia en honor al Cura Brochero denominada: “San José Gabriel del Rosario Brochero y la Purìsima” que contó con la presencia del Obispo Monseñor Sergio Buenanueva, autoridades locales y una nutrida convocatoria de la comunidad,

La escritoria de la vecina localidad Norma Magario de Mazzola hizo una referencia a la historia del nuevo espacio con el que cuenta la comunidad.

Todo comenzó en 1973, con la donación de un terreno por parte del señor Carlos Bianciotti, en la esquina de las calles Santa Fe y Julio A. Roca.

Por iniciativa del P. Juan Jayo, párroco de Devoto, se decide construir un salón de usos múltiples. La construcción se realizó con el apoyo desinteresado de toda la comunidad, “campañas del ladrillo”, ferias de platos, ventas de empanadas y pastelitos. Algunos carpinteros colaboraron con la mano de obra y el mobiliario donado.

A mediados de abril de 1975, comienza a funcionar como “Guardería Panambí”. La “Guardería Panambí” nació aquí, fruto de la lucidez pastoral de un sacerdote y de una Iglesia activa en la caridad. Las tareas las llevaban a cabo un grupo de personas de manera voluntaria. Asistían a niños vulnerables de 3 a 5 años, en el barrio, en el horario de 8.30 a 13.00 hs. Se brindaba desayuno y almuerzo, una nutritiva comida que ayudaba a fortalecer su crecimiento. Por la tarde, se llevaban actividades recreativas y luego servían la merienda. Siempre con la colaboración de las integrantes de Cáritas, quienes también daban cursos de cocina, costura, tejido. Incansables estas señoras, invertían muchas horas de su tiempo en brindarse al prójimo.

Los días viernes, las madres de los chicos concurrentes se encargaban de limpiar y acomodar el salón par la misa dominical. Otro grupo era el encargado de ayudar al sacerdote, preparar los elementos litúrgicos y la animación de la Santa Misa. El Padre Juan Jayo fue el impulsor fundamental en este proyecto, donde se respiraba fe, esperanza y caridad. Era común que él visitara los hogares de familias numerosas y ayudaba a suplir grandes carencias materiales. Se atendía además, Catequesis de Comunión y Confirmación. Allí mismo funcionó un “Centro de Alfabetización de Adultos”, en horario vespertino y nocturno.

Fue un ritmo febril de actividades, desplegadas en un simple y pequeño espacio físico, que desbordaba generosidad, esfuerzo y responsabilidad.

Pasaron varios años de oscura soledad y silencioso abandono. Pero un “bullicioso vecino”, nacido en agosto de 2017, de fraterno y humilde corazón “el Merendero del Curita Brochero”,  al cual voluntarios de Cáritas parroquial le dieron su impronta y movilizaron a toda la comunidad. Contagiados por tanto accionar, transformaron los despojos de esa esquina olvidada, en esta hermosa realidad que hoy nos sorprende.

Aquí la Iglesia “San José Gabriel del Rosario Brochero y la Purìsima” luce amplia, renovada, cómoda, también nacida por la generosidad de fieles cristianos. Nos invita a todos a compartir momentos de oración, a cuidarla mucho y a inspirarnos en la obra incansable que el “Cura Gaucho” realizó en favor de los más necesitados, siempre guiado por la Purísima. Dedicó toda su vida a educar a llevar el Evangelio; a eso nos invita a todos los bautizados.

“Bajo tu mirada Madre, seguimos caminando”. El Santo Cura Brochero nos acompaña. Todos bajo la atenta mirada de nuestro Santo Patrono “San José”, en estos 120 años de acompañar e iluminar la fe de nuestro pueblo.

La comunidad de Devoto hace entrega al Sr. Obispo Sergio Osvaldo Buenanueva, de la Iglesia “San José Gabriel del Rosario Brochero y la Purísima” y a la Diócesis de San Francisco, en su persona”