A pesar del fuerte respaldo que horas antes le dio la presidenta Cristina Fernández, Daniel Reposo retiró anoche su candidatura al cargo de procurador General de la Nación, tras la dura resistencia manifestada por la oposición parlamentaria contra su capacidad y sus antecedentes.

La renuncia fue informada por el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, quien reu­nió anoche a la prensa en Casa de Gobierno, pasadas las 22, luego de que en la Plaza de Mayo un nutrido grupo de personas realizara un cacerolazo en contra del Gobierno (ver A11).

 

El vocero leyó cuatro cartas enviadas por Reposo a la presidenta Fernández; al jefe de bancada del Frente para la Victoria del Senado, Miguel Ángel Pichetto; al de la UCR, Luis Naidenoff, y al vicepresidente, Amado Boudou.

En su reemplazo, la jefa del Estado decidió proponer como procuradora General a Alejandra Magdalena Gils Carbó, actual titular de la Fiscalía General ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, quien se opuso a la fusión de cablevisión con Multicanal.

En su nota de renuncia, Reposo esgrimió como argumento que era lo “más prudente y constructivo” para el modelo nacional y atacó con dureza a los diarios La Nación y Clarín porque cuestionaron su nominación.

“La circunstancias que rodearon el trámite del pliego me llevan a pensar que lo mejor es tomar esta decisión”, indicó.

Afirmó que a partir de su nominación “comenzó un ataque feroz desproporcionado en torno a mi persona, mi profesionalismo, mi desempeño en la función pública”.

Acusó a los dos diarios de hacer un “tratamiento discriminatorio y arbitrario”.

Sin embrago, aclaró que “de todas las cosas que se han dicho en estos días, nadie ha podido poner en juicio mi seriedad, mi profesionalismo, honradez y esmero”.