Este jueves fue operado Pablo, el joven de 19 años que padece epilepsia refractaria crónica y cuya madre se encadenó esta semana en la sala de espera del Hospital Iturraspe de San Francisco para exigir que su hijo sea intervenido quirúrgicamente.

"Los médicos me dijeron que está evolucionando bien, pero hay que esperar 72 horas para saber bien los resultados", explicó Mónica Favaz a El Periódico.

Cabe recordar que el martes pasado, desde la dirección del Hospital Iturraspe indicaron que la demora en la cirugía se dio por un cuadro febril del paciente. Sin embargo, confirmaron la cirugía rápidamente, la cual se llevó adelante ayer jueves 24 de marzo. 

Sobre la protesta que llevó adelante, la mujer contó que estuvo encadenada porque necesitaba que operen a su hijo.  "Me tenían con vueltas. Me dijeron que el jueves pasado iba a ser la cirugía y la programaron para hoy, pero no lo van a operar, estoy esperando respuestas”, había expresado.

Y continuó: “Mi hijo sufre epilepsia refractoria crónica y si estado se agravó, sigue convulsionando cada 15 minutos. La operación no es para que lo cure del todo, sino para que alivie la enfermedad, para que tenga un poquito de calidad de vida, que él pueda comer, caminar, hacer medianamente una vida normal”.

Según Mónica, la situación de Pablo se agravó en el último año y medio: “Lo interné más de 15 veces, le recargan la medicación, está bien una semana y vuelve a decaer. Me dicen que los neurocirujanos tienen otras prioridades cuando a mí el miércoles pasado, me dijeron que ni bien le baje la fiebre lo iban a operar y seguimos esperando”, manifestó.