Desde julio de 2015, Micaela Dotti (27) se desempeña la Delegación Oficial del Gobierno de la Provincia de Córdoba. La joven es secretaria de Leonardo Lewylle, director general de la dependencia. 

Allí llegó a través de la Fundación Síndrome de Down para el Apoyo e Integración (FUSDAI), una organización sin fines de lucro de la ciudad de Córdoba, creada en 1990 con el objetivo de romper prejuicios y promover la inclusión de estas personas en la familia, la escuela, la sociedad y el ámbito laboral.

“Repartí muchos curriculums pero no hubo forma. Después me fui a Córdoba a hacer una entrevista junto a mi hermana Gabriela y a Pía (Gutiérrez, psicóloga perteneciente al equipo de Fusdai). Estuve con dos chicos más que buscaban trabajo y quedé”, contó Micaela, que antes de desempeñarse en la dependencia estatal cumplió labores de secretaria en la fábrica de su papá, pasantías en una veterinaria, y trabajó en una juguetería y en un jardín maternal.

Merecida oportunidad para Micaela

Sus actividades

Las actividades de Micaela son variadas. Su función principal es asistir a Lewylle, de quien es secretaria, y ejercer tareas administrativas y de recepción. Así, por ejemplo, es la encargada de recibir y despachar correspondencia, o de concretar comunicaciones telefónicas. 

“Me tomo un café antes de empezar así estoy más activa, con más energía. A veces hago café para mis compañeros. Me llevo bien con ellos, los quiero a todos. Riego las plantas para que vayan tomando color. A veces pongo música. Mi jefe me da tareas y yo las hago”, contó orgullosa.

“Su evolución ha sido positiva, progresiva. Todos los meses le vamos dando un poco más de responsabilidades o tareas de un nivel mayor de complejidad”, aseguró Lewylle.

El director de la dependencia explicó que la joven “tiene un carácter distinto”. “A veces vienen personas para efectuar reclamos o con determinada urgencia y Micaela pone un manto de tranquilidad”, reveló conforme.

Cabe destacar que la joven también colabora en todos los eventos culturales que se realizan en la delegación. “Estoy contenta, me gusta todo”, resumió.

Relación  

La joven trabaja como empleada del Gobierno de la Provincia de Córdoba. Su relación se da a través de una beca otorgada por la Agencia Córdoba Cultura. “Es el paso inicial, la primera relación de dependencia, de vínculo que tiene. Después hay otros niveles”, aclaró Lewylle.

Sobre la remuneración por su trabajo, Micaela contó que la utiliza para salidas y que disfruta mucho ir al cine. A veces, también, para comprarse zapatos. “Ropa ya tengo bastante, para qué quiero más”, dijo.

Inclusión

Micaela remarcó que mantiene una buena relación con todo el equipo de trabajo y que se siente incluida. “El año pasado hubo una fiesta de fin de año, festejamos acá con todo el grupo, desde la planta baja hasta el cuarto piso. Vinieron todos, brindamos, fue lindo”, recordó.

Por su parte, Lewylle explicó que “si bien la inclusión nos compete a todos, hay que tener una mirada muy objetiva, hay una línea muy delgada entre la posibilidad y la oportunidad concreta. Nosotros buscamos ser consecuentes con eso”.

Y agregó que a partir de su experiencia ha recibido numerosas consultas. “Un amigo de Embalse me consultó sobre el tema. Ahora incorporó una trabajadora a su oficina privada con síndrome de down. Me consultaron también de Juárez Celman, donde la intendenta estaba con un caso similar, viendo de generar un espacio en el Ejecutivo municipal. Casos hay muchos, más de los que se conocen”, resumió.

“Me parece que vamos avanzando en el concepto de integración, que es lo importante, llegar a que un día esto no sea algo extraordinario, sino algo normal”, concluyó.

Merecida oportunidad para Micaela

Qué dice la ley

El Estado nacional, incluyendo sus organismos descentralizados o autárquicos, los entes públicos no estatales, las empresas del Estado y las empresas privadas concesionarias de servicios públicos, deben ocupar al menos el 4 por ciento de los cargos con personas con discapacidad. Pero esto no se cumple.

Es por ello que existen entidades que siguen luchando por la inclusión de las personas con discapacidad, entre ellas la inserción laboral, como lo es FUSDAI en Córdoba.

Esta fundación tiene como propósito contribuir a la plena inclusión familiar, escolar, laboral y social de la persona con síndrome de Down, o con otras necesidades especiales, colaborando en el desarrollo integral y armonioso de sus potencialidades. A su vez, promover una valoración social positiva de sus diferencias y semejanzas, en pos de la construcción de una sociedad más justa y solidaria.

Proceso de inclusión

El joven que obtiene empleo a través de Fusdai cumple cuatro etapas en su desarrollo laboral.

Adaptación y capacitación: el joven inicia su adaptación a la empresa y su capacitación en el puesto de trabajo con el cumplimiento de jornada parcial y la mediación de un equipo de profesionales en forma diaria.

Afianzamiento: se consolida la inclusión laboral a la empresa. El joven pasa progresivamente del cumplimiento de la jornada parcial a la jornada total. La mediación se realiza de 1 a 3 veces por semana.

Inclusión laboral: plena inclusión del joven en el puesto de trabajo con cumplimiento de la jornada completa. El equipo hace de mediados entre 2 y 4 veces por semana.

Independencia laboral: el joven está totalmente incluido a su puesto de trabajo con contratación efectiva y se independiza de la mediación. El equipo de profesionales mantiene contacto esporádico con la empresa y el joven.