Se estima que su inauguración será en abril de este año, aunque aún no hay una fecha definida y las obras siguen su marcha. La Comunidad Terapéutica para recuperación de adicciones que funcionará en el predio del Hospital Iturraspe en San Francisco permitirá tratar a más de 100 personas por año que sufren adicciones a las drogas, con internaciones de unos 90 días en promedio. El centro púbico local será del tipo de mayor complejidad (grado 4) en la Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba (RAAC) y el segundo en su tipo en todo el territorio provincial, tras ser inaugurado el primero en Santa María de Punilla en diciembre pasado.

¿Para qué va a servir y cómo va a funcionar? Desde la Secretaría de Prevención y Asistencia a las Adicciones, su responsable, Darío Gigena Parker, aclaró que para ingresar a esta comunidad de recuperación las personas tendrán que cumplir ciertos criterios, que el ingreso deberá ser voluntario y a la vez indicado por un equipo interdisciplinario; y que las internaciones por sí solas no conducen sin más a una recuperación sostenida en los pacientes, sino que deben acompañarse con otras acciones individuales y del sistema de salud. 

"Sería un salto de calidad importante para las personas de la ciudad y la región para tratar adicciones porque antes no había dispositivos de este tipo en la zona. Son más de 100 personas al año que podrán acceder a un tratamiento completo, algunos estarán más, otros estarán menos tiempo", señaló Gigena Parker a El Periódico.

El funcionario resaltó que para poder tratarse en la Comunidad, la persona tiene que aceptar voluntariamente el ingreso, tal como lo estipula la Ley de Salud Mental provincial. Esto no puede ocurrir, por ejemplo, ante sobredosis o episodios graves derivados del consumo de drogas, lo que debe ser abordado y estabilizado en el nivel 3 de la red, es decir en un centro hospitalario. "Hay que saber manejar estas crisis, porque si queremos resolver inmediatamente un problema crónico de muchos años, probablemente desvirtúe o dañe la comunidad terapéutica que se formó; es decir no el edificio, sino el trabajo entre el equipo profesional y las personas que están siendo asistidas. Por ejemplo, si hay alguien que tiene conflictos actuales con la ley y está evitando las consecuencias de la Justicia usando ese espacio, no le va a servir ni a él ni a la comunidad que está en recuperación", detalló el especialista.

Por otro lado, subrayó la ventaja de que en San Francisco la Comunidad va a funcionar dentro del predio del Hospital Iturraspe, donde ya hay un centro de tercer nivel (en Salud Mental), para casos agudos, de estabilización y desintoxicación. "Al estar tan cerca, podemos hacer un trabajo más preciso", justificó. 

Eficacia

Consultado acerca de la eficacia de los tratamientos, Gigena Parker habló de dejar a un lado enfoques ingenuos sobre los tratamientos para adicciones. "Si uno lo mira desde un enfoque de una enfermedad aguda, es como pensar que una persona diabética ya está curada para siempre porque haya ido al médico y haya empezado un tratamiento. La sociedad entiende que no es así. Si la persona anda bien un tiempo y después no cumple con la dieta o no va al control médico, no significa que haya sido un fracaso el tratamiento, sino que es normal en una condición crónica de salud", ejemplificó.

En este sentido, destacó que en muchos casos no alcanza con un solo tratamiento o internación breve. "Eso es lo que muchas veces no se entiende, que las personas afectadas por adicciones pueden tener múltiples tratamientos para lograr una recuperación sostenida en el tiempo. La investigación y la experiencia nos muestra que no es algo que con una sola intervención aislada o sencilla pueda terminar en la curación, al igual que sucede con el asma, la diabetes o la hipertensión. A vos te pica una víbora, te dan el antídoto y nunca más tenés problemas; en esto no", justificó.

Además, indicó que las tasas de recaídas son altas, situadas entre un 50% y 60% de las personas que hicieron tratamientos. "Pero si no tuvieran tratamiento todos seguirían consumiendo y lo mismo pasa con otras enfermedades crónicas. Por eso el desafío de la salud pública es captar esas personas y hacer el tratamiento lo más precoz posible antes de que la enfermedad avance y haya más complicaciones, como la diabetes. Lo mismo pasa con las adicciones, el desafío del sistema es generar instancias accesibles de tratamiento para que una persona tenga la chance de lograr una recuperación estable". 

Recuperación

El secretario de Prevención y Asistencia remarcó que la recuperación sostenida es posible, pero que no todos los casos son iguales: mientras algunas personas pueden hacerlo con un solo tratamiento, otras necesitan de varios intentos. “La evidencia científica dice que las personas necesitan varios episodios de tratamiento para lograr una recuperación sostenida, que son una excepción aquellos que lo logran en un sólo episodio de tratamiento. No es lo mismo alguien que consume todo el día que alguien que está consumiendo pero no quiere, que estudia o trabaja, que hace controles médicos y se va acercando a la meta de recuperarse. En ese caso no lo va a hacer internado, sino ambulatoriamente”, analizó.

Por otra parte, el profesional precisó que hay personas que ante una recuperación exitosa en un tratamiento inicial pueden tener una recaída en los primeros tres meses posteriores, que consideró la etapa de más riesgo. “Esas personas lo ideal es que sistema los acoja lo más tempranamente posible para que no se profundice la recaída y vuelva a las vías de recuperación lo antes posible”, detalló.

EN CIFRAS

27

Serían la cantidad de personas que trabajará en la Comunidad Terapéutica, aproximadamente. Incluye los cargos de director y codirector, aún no desginados.

90 días

Será, en promedio, la duración de los tratamientos completos con internación.

28

Serán las plazas de pacientes que dispondrá la Comunidad.

2

La de San Francisco será la segunda Comunidad Terapéutica pública en la provincia