Una máquina de color amarillo se impone en medio del gris de las paredes y el marrón predominante de los cartones acomodados a los costados dentro del galpón que forma parte de la sede de la Cooperativa La Virgencita (Lamadrid 822) en barrio Parque.

La flamante prensa compactadora, que tiene 18 metros de largo y funciona hace casi un mes, permitirá cuadriplicar la producción diaria de cartón que luego saldrá a la venta y que volverá en ingresos económicos a quienes forman parte de la cooperativa: 95 personas, y también a sus familias.

La Virgencita está en condiciones de reciclar más para seguir compactando la desigualdad

Eva y Gisela, dos de las referentes del lugar, ponen a prueba la máquina ya al mediodía de este lunes, momentos en que es presentada oficialmente. La novedad no está solo en su tamaño y en la capacidad de trabajo, sino además en las comodidades que brinda respecto a las dos prensas verticales que ya venían utilizando. Por ejemplo, una cinta transportadora lleva el material hacia la prensa sin necesidad de hacerlo a mano como antes, aliviando la actividad.

Emilio Amé, extitular de Cáritas Diocesana San Francisco pero integrante de La Virgencita, contó que la fabricación comenzó en mayo del año pasado y poco más de un año después pudieron terminarla y colocarla.

Además hizo un repaso de cómo surgió este proyecto y las manos que se fueron sumando para hacerlo realidad. En el año 2020, miembros de la cooperativa se reunieron con el decano de la Facultad San Francisco de UTN, Alberto Toloza, para delinear la construcción de esta prensa. Con el diseño listo comenzaron los trabajos de ensamblado en el Parque Industrial, tarea que estuvo a cargo de la firma AG Industrial de Andrés Goirán.

Cabe destacar que en paralelo a este proyecto se terminó la obra del galpón de 350 metros en el mismo predio.

“Esta máquina nos da otra capacidad de trabajo, de 2000 kilos por hora. El conglomerado San Francisco, Frontera y Josefina genera 180 toneladas de residuos sólidos urbanos por día y unas 50 son de papel, cartón y plástico. Esto nos permite en el corto plazo trabajar más en conjunto con el municipio para lograr mayor cantidad de materiales que se reciclan”, explicó Amé.

Como la idea es cuadriplicar la cantidad de material, se estima que podrán vender más de 12 mil kilos de material reciclable por día.

De los inicios hasta hoy

Silvino Buraschi tiene 92 años y es uno de los impulsores de la Asociación Civil La Virgencita, hoy cumpliendo el rol de tesorero.

Rememoró que iniciaron con este grandioso proyecto hace 30 años atrás y en una casa particular.

Evaristo Giordano (presidente de la Asoc. Civil), Emilio Amé y Silvino Buraschi.
Evaristo Giordano (presidente de la Asoc. Civil), Emilio Amé y Silvino Buraschi.

“La primera semillita acá la pusieron unos chicos que participaron de un encuentro y allí surgió la necesidad de hacer algo. Eso fue en octubre de 1992, en una casa de familia les dábamos de comer a seis o siete chicos de la parroquia San José Obrero. Cuando empezó a tomar volumen la cantidad de gente alquilamos una casa por Juan de Garay donde estuvimos muchos años. Luego mucha gente empezó a colaborar, hasta que el municipio nos donó el terreno donde nos instalamos”, resumió.

Al analizar la actualidad del espacio, Buraschi dijo: “Cada vez esto toma más color, se genera algo social e importante independientemente de todo lo que pasó. A mí siempre me queda el placer de pensar que son 90 familias que hoy se dignificaron con este trabajo. Casi 300 personas que pueden vivir de otra manera”, valoró.

Dar trabajo

Por su parte, Amé dijo que desde 2008 llevan adelante acompañamiento escolar a niños y adolescentes dando una mano a las familias: “Acompañamos en la educación no formal, enseñando valores, el poder compartir… valores que en algunas casas cuesta y tratamos de dar una mano desde acá”, señaló.

Amé dijo que si bien lograron cambiar la realidad de muchos niños y adolescentes, entendían que había una problemática que sufría la comunidad local y que eran las adicciones.

“Decidimos empezar con un hogar de día para acompañar a las personas que tienen problemas de sustancias y en 2018 logramos que los chicos empiecen a estar adentro. Estaban acá y compartíamos todas las tardes, pero nos faltaba hacer algo más. Ahí viene lo de la cooperativa”, recordó.

En 2019 se inauguró el galpón y abrieron la cooperativa de cartón: “Fue pensada para mujeres en un principio, pero decidimos ampliar el acompañamiento a la comunidad por el flagelo de las adicciones y ampliamos el acompañamiento a todos. En enero de 2019 abrimos la puerta de este galpón”.

Con la nueva prensa la idea es cuadriplicar lo reciclado al momento.
Con la nueva prensa la idea es cuadriplicar lo reciclado al momento.

Según agregó, en los primeros ocho meses de trabajo se llenó el primer camión con 17 kilos de cartón: “Para enero de 2020 comprábamos 4 mil kilos por día. Lo que era un galpón enorme pasó a ser todo cartón, hasta el techo, no entraba más y había una sola prensa. Fuimos a buscar otra al norte cordobés. Dijimos si la proyección es esta no vamos a llegar a prensar lo que compramos por día con dos prensas que nos daban capacidad de 2000 kilos por día y nosotros comprábamos 4000”.

Luego vendría todo lo que explicó el mismo Amé en un comienzo: la vinculación con UTN y demás actores de la ciudad que dieron su mano para la inauguración de la nueva prensa.

“La cooperativa pasó ser una excusa para vincularnos y trabajar con la persona que trabaja en el reciclado y eso es lo que nos interesa, el negocio es secundario para nosotros. Nos importa el bienestar y mejorar calidad de vida de los chicos de la calle o que están en el relleno (basural) juntando para poder vivir”, manifestó Amé.

Nuevos proyectos

Finalizada la construcción del último galpón donde funciona la nueva prensa, en la esquina de Lamadrid y Dante Agodino se levanta un espacio múltiple para contener a la primera infancia, esto es, a los niños y niñas de entre 45 días y 4 años hijos de vecinos del barrio y que tengan vínculo con la institución.

“Arrancamos a hacer un salón de usos múltiples y cinco aulas para ampliar la parte de Informática, para que los chicos tengan acceso a las computadoras y las demás para atención de primera infancia. Dos de ellas consultorios; atención primaria de la salud, de hacer prevención y que no lleguen al centro de saludo cuando hay poco por hacer”, contó Amé.

Tema del día: inauguran prensa en La Virgencita