Una pérdida en un tubo de oxígeno por una mala colocación del manómetro habría sido la causa de un principio de incendio en la madrugada del viernes en el Área de Neonatología del Hospital Iturraspe.

Una enfermera que cumplía funciones en ese momento intentó abrir el tubo y al hacerlo se generó una chispa que causó el inicio del fuego en algunos elementos plásticos que estaban en la sala. El fogonazo además provocó quemaduras en una de las manos de la mujer, quien trató de sofocar el fuego como pudo, algo que terminó se logrando con la ayuda de otros compañeros que apelaron a uno de los matafuegos. 

Al hospital arribaron dos dotaciones de Bomberos Voluntarios, los que se encargaron de terminar el trabajo y eliminar todos los restos de humo y hollín que se esparcieron rápidamente por los recintos del edificio de calle Cullen. Trabajaron más de una hora y media en el lugar.

La enfermera, por su parte, se encontraba en observación y evolucionando positivamente de su herida en la mano y de un principio de asfixia por inhalación de humo.

Niños evacuados

La mayor preocupación fue porque tras el incendio se debieron evacuar siete niños menores de un mes que estaban internados en neonatología. El vicedirector del Iturraspe, Valentín Vicente informó a El Periódico que no debieron derivarlos y que los trasladaron de sala: “No hizo falta derivarlos a otro lugar sino que fueron reubicados en una sala del servicio de pediatría donde se armó una neonatología. Todos los bebés estaban evolucionando muy bien”, dijo.

Vicente explicó que la sala permanecía clausurada a la espera de un peritaje por orden judicial que iba a ser realizado por la División Bomberos de la Policía de Córdoba y que estimaba que en las próximas 48 horas la sala podría estar apta para ser otra vez utilizada.

Sobre los daños materiales causados en el lugar por el incendio, el médico contó que resultó averiada una incubadora.

Por último, Vicente aclaró que entre hospital y el hogar de ancianos que funciona en el predio hay más de 30 matafuegos, correctamente ubicados y con el mantenimiento adecuado, desmintiendo algunas versiones que indicaban que el edificio no contaba con este tipo de extintores.