Este domingo en el predio "Nicolás Losano" de Sportivo Belgrano se vivieron momentos de tensión cuando un niño se tragó un anillo y comenzó a ahogarse. Sin embargo, Germán Vélez advirtió la situación y, gracias a la capacitación que recibió en la fábrica donde trabaja, pudo salvarle la vida.

Vélez había asistido a ver el partido de primera de Liga Regional, como cualquier papá fue a la cancha a ver a su hijo y terminó convirtiéndose en héroe.

"Fui a la cancha ver a mi hijo que juega en Sportivo, estaba en la tribuna y unas escaleras mas abajo había una señora con un nene de 6 o 7 años. El nene fue al baño y cuando volvió se empezó a sentir mal, no respiraba bien porque se había tragado algo y estaba ahogado. Empezamos a ver que le faltaba el aire, alcanzó a decirle algo a la mamá pero sabíamos que pasaba", contó.

El hombre comentó que hace un mes hizo el curso de primeros auxilios que brindó Cruz Verde en la fábrica Macoser. "No lo pensé, nosotros tuvimos el curso con Cruz Verde en la fábrica y sabía hacer la maniobra, así que actué rápido, bajé hasta donde estaban y la mamá me dijo que se había tragado un anillo. Le hice la maniobra tres o cuatro veces y despidió el anillo", señaló.

"Me emocioné, besé al nene y subí de nuevo a la tribuna porque me largaba a llorar", agregó.

Mantener la calma

"Mucha gente se arrimó, estaban todos desesperados y me decían que le meta la mano en la boca pero yo sabía que no, que había que seguir haciendo esa maniobra que iba a dar resultado", comentó Vélez.

"La clave es estar tranquilo, no lo pensé demasiado porque yo sabía cómo actuar", agregó.