Por Nicolás Albera y Faustino Rizzi

La reciente puesta en marcha de la cloaca máxima, lo que habilitará a la Municipalidad a empezar en breve con los trabajos para llevar las redes a barrio La Milka, marca el pulso actual de la gestión de Ignacio García Aresca, quien se muestra satisfecho ante la materialización de obras imprescindibles para una ciudad, que van bajo tierra pero que les solucionan la vida a los vecinos.

Antes de una entrevista extensa con El Periódico, el intendente resalta además en su despacho las obras de pavimento en los barrios, luego de que en esta semana inicien los trabajos en barrio Independencia, y agrega que continuarán en 20 de Junio y Magdalena I. Enseguida destaca que la decisión de incorporar una Planta Hormigonera no era en vano porque abarata los costos. “Esta obra de pavimento que los vecinos van a tener para toda la vida vale casi lo mismo que un teléfono celular”, dice en referencia a las marcas y modelos más importantes.

Por otra parte, García Aresca se manifiesta como parte de “un proyecto”, en caso de un llamado para formar parte de una lista en las legislativas nacionales de este año, aunque señala que tiene claro que su objetivo es finalizar su mandato. Pero no solo eso, sino que redobla la apuesta y piensa en cuatro años más de mandato.

También responde otros temas más controvertidos: las críticas por la vacunación “vip”, las demoras en el loteo “Lo tengo” y los planes para una Tecnoteca todavía en veremos.

- ¿Cómo afronta un nuevo año de mandato con la pandemia del coronavirus de por medio y la posibilidad de una segunda ola de contagio para estos meses?

El año pasado nos sirvió de experiencia respecto a situaciones que eran impensadas. De golpe, de estar teniendo un año en el que hicimos un inicio de sesiones con expectativas y proyectos para adelante a los 10 o 12 días teníamos que entrar en una restricción de las distintas actividades, de ingreso a la ciudad como un montón de situaciones productivas y también sentimentales. Empezamos con testeos, situaciones que nadie conocía, fuimos sobre la marcha trabajando con un montón de herramientas que nos posibilitaron que la ciudad siga con actividades. Pasada una etapa empezamos con algunas actividades que estaban restringidas a tenerlas de a poco, y hemos terminado el año con la mayoría desarrollándose. No es lo que uno desea, pero en la general podemos estar satisfechos con lo que se hizo. Se puede medir de acuerdo a la situación económica, de salud, a las medias que tomó la Nación o la Provincia, todo se puede medir, pero realmente nosotros en general estamos satisfechos por el trabajo que se realizó.

- A diferencia del año pasado ahora está la vacuna. ¿Eso mejora el panorama?

Por supuesto que la vacuna ayuda, te da esperanzas, nos va a ayudar a que la sociedad siga pudiendo tener actividades que anteriormente no se podían hacer, pero nos tenemos que seguir cuidando todo este año con el uso de barbijo, el distanciamiento, en las relaciones de no creer que podemos estar libremente en un espacio cerrado. Tenemos que seguir teniendo los protocolos como los veníamos realizando porque hay personas que no se vacunaron, personas que más allá de haber tenido Covid no se sabe lo que es una nueva ola, ya que aparecieron nuevas cepas. Es un contexto que los están viviendo primero otros países de Europa, Brasil, Chile; países que tuvieron situaciones con vacuna y se incrementaron los casos. Ante esa situación tenemos que estar siempre alertas y trabajando como lo veníamos haciendo.

- Muchos transportistas que pasan por la ciudad vienen de estos países limítrofes: ¿habrá que poner en breve nuevos controles en los accesos?

Nosotros hicimos un trabajo de transporte el primer día con la aduana, con restricciones. Elaboramos un programa con un decreto que después el país lo tomó porque se llevó a la provincia de Córdoba y de ahí se envió a la Nación. San Luis también tomó esta disposición y ahora estamos en una situación donde nos preguntamos qué hacemos con los camiones o las personas que vienen de Brasil. Creo que ahora es el momento de controlar la frontera. Nosotros vivimos en una provincia que es mediterránea y San Francisco está dentro. De todos modos, veremos cómo avanza la situación. Si hay que tomar medidas las voy a tomar.

- Pasa a veces que son medidas no muy simpáticas para la población.

Si uno lo ve como Estado, son medidas que ocurren en otros lugares, pero claro que la mirada de a quien realmente golpea es otra que puede pensar que es abusivo. Pero de tomar alguna medida será consensuada. Hemos buscado el año pasado soluciones, hemos entregado ayuda impositiva hasta subsidios.

Entrevista: Ignacio García Aresca, intendente de San Francisco

¿Un período más?

- ¿Su segundo mandato termina con usted a la cabeza?

Hasta 2023 soy el intendente.

- ¿Pero su nombre aparece en posibles listas de candidatos a diputados y senadores para las próximas legislativas?

Cuando llegan las épocas de elecciones empiezan a tirarse nombres y eso es por algo. Ser intendente de una de las ciudades más importantes, con su desarrollo, por supuesto que a uno lo van a nombrar. Pero hoy no es mi prioridad, no he hablado con nadie. Después si viene una decisión del gobernador de acompañar un proyecto lo haré, pero hoy no pienso en un cargo nacional.

- ¿Se puede decir que no a un ofrecimiento del gobernador?

Particularmente lo puedo decir pero estoy dentro de un proyecto provincial. Ya le pasó a Martín, siempre digo que los lugares se deben ocupar sea nivel nacional, provincial. No solo en la política sino de los distintos sectores.

- Ya sea antes o en 2023: ¿hay sucesores en vista?

García Aresca.

- Pero no puede volver a presentarse.

¿Por qué?

- Hay una ley electoral provincial (10.406) que no le permite un tercer mandato consecutivo.

¿Quién dice que llega a 2023 esta ley?

- ¿Va a pedir junto a otros intendentes y legisladores cambiarla entonces? Se habló en algún momento de lanzar un plebiscito.

En el 2016 se trató esa ley, que habla para atrás. Porque dice que el primer mandato empieza en 2015 y no se legisla para atrás. Después si quiero o no es otra cosa. Pero el primer mandato debiera ser el del 2019-2023. Es mi pensamiento. Entonces lo hablé con los legisladores, el presidente de bloque (Francisco Fortuna) y hay que salir al debate y plantearse por qué legislar para atrás. Nosotros estamos por voto popular y una ley no me puede prohibir presentarme. Si yo quiero estar, quiero que la oportunidad me la de la gente, no una ley. Vamos a trabajar en la posibilidad de tener el otro mandato.