Florencia Burgos, enfermera profesional, y Soledad Bustamante, licenciada en enfermería, se convirtieron también este jueves en conductoras de las ambulancias de la empresa de emergencias médicas Ucemed, al obtener su licencia de conducir tipo D3 para el manejo de este tipo de vehículos.

Aunque ambas se especializan en enfermería, su rol central dentro de la empresa, se planteó puertas adentro la necesidad de que cualquiera se encuentre preparado para asumir otro rol que generalmente es desempeñado por hombres.

Florencia y Soledad con sus respectivas licencias.
Florencia y Soledad con sus respectivas licencias.

Burgos comentó a El Periódico que el tema del carnet surgió por una necesidad personal de crecimiento: “Hoy están nuestros compañeros que desempeñan la tarea como choferes y enfermeros, entonces es como algo personal el desafío. Ya teníamos el carnet convencional de auto, lógicamente para cubrir por ejemplo el servicio de enfermería a domicilio. Pero ahora fue aprender a dominar un vehículo que es un poco más grande de lo que estamos acostumbradas a manejar”, reconoció.

Para la tarea las ayudó uno de sus compañeros, Diego, quien las guió en cuestiones de manejo de ambulancia. Luego, ambas obtuvieron su licencia en la Dirección Municipal de Tránsito.

Bustamante, por su parte, hace 19 años que trabaja en Ucemed. Hoy se desempeña en la ambulancia de unidad coronaria, que es la que atiende emergencias en la calle: “Pasamos por distintos sectores de la empresa. La iniciativa nació de nuestro director médico (Diego Lahournere), que nos dijo que estaría bueno que manejáramos la ambulancia. Nos juntamos con Flor y de uno de nuestros compañeros (por Diego) nos tuvo paciencia. Si bien ya manejamos auto, es saber qué lugar ocupa en la calle una ambulancia, estacionar y demás”, reconoció.

Desafío personal

Para ambas aprender a desempeñar este rol era una “cuestión personal” más allá de que seguirán desempeñando su rol.

“A nivel laboral influye ante cualquier eventualidad. Me ha pasado más de una vez tener que manejar la ambulancia hacia un nosocomio porque había un paciente exaltado que por ser mujeres no tenemos la fuerza para sostenerlo. Entonces los mismos hombres nos dijeron ‘manejá vos, yo lo sostengo’. Y para eso hay que prepararse”, sostuvo Bustamante.

Para Burgos es algo “excelente” sumar nuevos roles: “Creo que es una cuestión de igualdad, si bien siempre se priorizó que el hombre maneje la ambulancia y está perfecto. El chofer de ambulancia tiene un trabajo grande, no solo manejar, sino manejar camilla, sillas de ruedas con pacientes, trabajos que requieren fuerza, pero ante una eventualidad nosotras también podemos colaborar. Entonces me parece una muy buena iniciativa que se nos incluya en esta tarea”, definió.

En el mismo sentido, Bustamante agregó: “Es un poco también el paradigma, lo que se viene, las mujeres estamos empezando a ganar espacios de igualdad. No es que queremos hacer la tarea de nuestros compañeros, porque ellos la hacen muy bien, sino tener igualdad de condiciones para trabajar”, resumió.