La firma ZF Argentina volvió este martes al ruedo, tras haber cerrado sus puertas el pasado 20 de marzo cuando se inició el aislamiento social, preventivo y obligatorio ante el avance del nuevo coronavirus.

Lo confirmó a El Periódico Alejandro Roasso, director general de la empresa de capitales alemanes radicada en nuestra ciudad, quien contó que el regreso a la actividad se logró con la aplicación de un protocolo “muy completo que fue aprobado por el COE en Córdoba y el Ministerio de Industria”. Cabe recordar que a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia había quedado establecido el reinicio de las actividades de exportación.

La semana pasada, este medio anticipaba que ZF Argentina había presentado ante el Departamento de Trabajo el trámite, en forma virtual, para obtener un procedimiento preventivo de crisis, aludiendo a la emergencia sanitaria actual que impacta directamente en su producción de amortiguadores.

Asimismo, la firma se inscribió en el programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), del Estado nacional, para acceder a beneficios y paliar la difícil situación que atraviesan.

El grupo de operarios que volvió a la fábrica ubicada sobre Avenida de la Universidad, supera los 200 actualmente y no se encuentran incluidos aquellos trabajadores contemplados en los grupos de riesgo. También en algunos casos sigue la modalidad del teletrabajo.

Roasso estimaba previamente al regreso que la baja de producción para todo el año podía estar entre el 40 y el 60 por ciento, aunque no descartó peores cifras.

Acuerdo en la UOM

Por otro lado, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) firmó el martes un acuerdo de suspensiones con la principal cámara empresaria del rubro, Adimra, en similares condiciones que el que suscribieron la CGT y la Unión Industrial.

El entendimiento contempla para los trabajadores impedidos de concurrir a sus labores por la cuarentena el pago del 70% de sus salarios en bruto, lo que equivale al 86% del sueldo de bolsillo, dijeron en el sector, y una vigencia por cuatro meses, hasta julio, renovable en la medida en que se amplíe el aislamiento.

Asimismo, el acuerdo extiende las condiciones de suspensión a los trabajadores eximidos de concurrir a sus empleos por ser población de riesgo, ya sea por edad o por condiciones de salud.

El entendimiento metalúrgico tiene también como eje la garantía de estabilidad de los puestos de trabajo durante su vigencia.