Desde de diciembre el obispado está vacante por el traslado de monseñor Carlos Tissera a Quilmes. En nuestra comunidad católica existen candidatos para el puesto, uno de ellos es el actual administrador diocesano, monseñor Daniel Cavallo. Sin embargo, al ser consultado al respecto, el sacerdote prefiere continuar su misión como párroco de la Iglesia Catedral. “San Pablo dice que el episcopado es un servicio y como servicio más que nunca en estos tiempos es una carga. En esta instancia, todos los sacerdotes tenemos la posibilidad de ser convocados por el Papa, pero prefiero seguir siendo párroco de Catedral y brindar mi servicio ahí”, declaró.

Con respecto a los tiempos que se manejan para la designación del nuevo obispo, Cavallo sostuvo que “los trámites propios de la nunciatura van a llevar casi todo este año, estimo que para fines de este 2012 el santo Padre dará anuncio de quién será obispo. Sobre todo teniendo consciencia de que en Argentina hay varias diócesis que están vacantes por la renuncia de obispos titulares que han cumplido la mayoría de edad, que son los 75 años. Por lo tanto es un trámite que hay que ser paciente con el tiempo del nombramiento”, finalizó.