La semana pasada, el cuartel de Bomberos Voluntarios San Francisco recibió la visita de cuatro bomberos de Rancagua, Chile. Durante cuatro días, estos héroes se quedaron en el cuartel central, donde compartieron momentos significativos y solidarios con sus pares argentinos. Esta visita no solo fue un intercambio cultural, sino que tuvo un propósito noble: apoyar a Florencia Cortez, la hija de trece años de uno de los visitantes, que enfrenta desafíos significativos en su vida diaria.

Florencia, que sufre de hemiparesia en el lado derecho de su cuerpo, así como de epilepsia y trastorno severo del sueño, ha tenido que lidiar con las secuelas de una enfermedad que cursó mientras estaba en el vientre de su madre. Aún sin un diagnóstico certero, su situación ha requerido que utilice un andador especial para poder movilizarse con mayor autonomía. Sin embargo, el costo de este andador en Chile era elevado, lo que motivó a los bomberos de San Francisco a actuar.

El vínculo entre ambos cuerpos de bomberos se fortaleció por el deseo de ayudar a Florencia. Así, los directivos de Bomberos San Francisco gestionaron la obtención de un andador adecuado, mucho más accesible para su compra en Argentina. Durante su estancia, los bomberos chilenos no solo recibieron este elemento, sino que también participaron en diferentes actividades, incluyendo el combate del incendio ocurrido en el bar de Gamo y una visita a la cancha del Club Sportivo Belgrano.

La entrega del andador fue un momento emotivo, donde se pudo apreciar la alegría de Florencia, quien anteriormente había expresado su deseo de volver a caminar por sí misma, un sueño que ha anhelado durante mucho tiempo. “Muchas gracias bomberos de Argentina, les quería dar las gracias por ayudar a mis papás a comprar mi carrito. Un sueño mío es volver a caminar. De Chile les mando un beso, y muchas gracias por ayudarme, yo sé que puedo volver a caminar”, comentó la joven, visiblemente emocionada.

Florencia asiste tres veces por semana a la Teletón, una institución dedicada a la rehabilitación, que ofrece un enfoque integral para potenciar y promover la dignidad de las personas con discapacidad. Gracias a esto, la joven también espera poder regresar a la escuela y llevar una vida más activa y plena.

En 2022, enfrentó una difícil cirugía en la cadera, rodillas y tobillos, cuyos resultados no fueron los esperados. A pesar de estos desafíos, la joven se mantiene resiliente y optimista, apoyada por su familia y por iniciativas como esta, que resaltan la importancia de la solidaridad y el apoyo comunitario.

La visita de los bomberos de Rancagua ha dejado una huella profunda en el cuartel de Bomberos San Francisco, recordándonos que la unión y la empatía pueden marcar la diferencia en la vida de aquellos que más lo necesitan. Este acto de bondad ha fortalecido los lazos entre ambos cuerpos de bomberos, dejando claro que, sin importar la nacionalidad, todos compartimos la misma misión: ayudar al prójimo y fomentar la esperanza.