“La idea de la Educación Sexual Integral (ESI) es despatologizarla, sacarla de la cuestión jurídica y mostrar que trabajar la sexualidad en las escuelas es necesario, porque tenemos que aceptar la diversidad, que el género es una construcción social, que es un derecho, es una manera de promover la salud, de que los estudiantes se valoren a sí mismos y puedan decidir respecto de su propio cuerpo y a cómo vivir su sexualidad”, asegura Mariana Lozano, psicóloga y miembro del Equipo Profesional de Acompañamiento Educativo (EPAE).

La opinión del equipo se enmarca en la jornada que este viernes se llevó a cabo sobre Educación Sexual Integral, que convocó a docentes de Biología y Formación para la Vida y el Trabajo (nivel secundario), de Ciudadanía y Participación y Ciencias Naturales y Sociales (nivel primario) y de Educación Física (ambos niveles) así como a directivos de los distintos establecimientos de la ciudad.

La jornada

Lozano explicó que la iniciativa, denominada “La ESI, de lo curricular a lo institucional”, fue una propuesta que surgió del Ministerio de Educación en colaboración con los equipos del interior.

La profesional tildó el encuentro de “muy importante” y comentó: “La mirada estuvo puesta en qué paso con la ESI en estos 12 años de implementación de la ley y en una mirada interna para entender que la sexualidad es mucho más amplia que el aspecto biológico. Forma parte de la identidad, nos reconoce como diferentes y fundamentalmente se parte de cinco ejes de la ESI que tienen que ver con la perspectiva de género, el enfoque de derechos, la promoción de la salud, la atención a la afectividad y el respeto por la diversidad”.

“Se trabajó con los docentes para reconocer que la sexualidad siempre está presente en la escuela. Fue una oportunidad para poder reflexionar”, detalló la psicóloga.

Cómo sigue

Lozano manifestó que tras el encuentro, ahora cada escuela deberá implementar dispositivo institucional hacia su interior con el acompañamiento del EPAE y del supervisor “para ver qué impacto tiene esta jornada y cómo se puede seguir trabajando”.

“La idea es trabajarlo transversalmente para que no quede sólo en la figura del equipo directivo o en la figura del docente de biología, o que se crea que se trabajó la ESI porque se convocó a un equipo externo, sino que sea la escuela la que forme un equipo de implementación de ESI, que lo trabaje internamente”, apuntó.

A su vez adelantó que, debido a que la reunión convocó a establecimientos locales pero que el área de cobertura del EPAE es más amplia, la propuesta será replicará en la región por dicho equipo de trabajo con dos jornadas similares.

Qué dice la ley

La Ley de Educación Sexual Integral fue sancionada en octubre de 2006 con el objetivo de garantizar la ESI de todos los niños, niñas y adolescentes. “Progresivamente se ha ido implementando en las escuelas con mayores o menores dificultades”, manifestó Lozano.

La mujer recordó que Córdoba adhiere a la misma desde 2008 generándose un programa provincial afín. “Adhiere como contenido transversal en todos los niveles, incluso en el nivel inicial”, explicó la profesional.

La escuela como espacio de protección

Si bien el encuentro convocó a los niveles primario y secundario, para la psicóloga es “muy importante”, también, trabajar la ESI en el nivel inicial: “En los juegos, en los secretos. Muchas veces la escuela es un escenario en donde se pueden revelar pautas familiares poco saludables”.

Lozano subrayó que la escuela está obligada, como agente público, a denunciar situaciones que vulneran los derechos de los niños o adolescentes.

“La escuela en general se compromete y es un espacio de protección de la infancia, por ahí tiene sus miedos como toda institución, pero en general se compromete”, dijo.

Sobre si es frecuente que la escuela denuncie casos de vulneración de derechos, manifestó: “No es tan frecuente, no nos olvidemos que la mayoría de estas situaciones se dan en los espacios familiares y muchas veces la violencia encuentra justamente en la amenaza o en el secreto su lugar”.

Y sobre el final, afirmó: “Justamente la idea de la ESI es despatologizarla, sacarla de la cuestión jurídica y mostrar que trabajar la sexualidad en las escuelas es necesario”,