Todo lo bueno que das, en algún momento vuelve. Suena a eslogan pero aplica para la vida de Eusebio "Tito" Lamberti (84): bibliotecario del club El Tala, ordenanza por varios años del colegio San Martín, ciudadano ilustre de San Francisco –distinción otorgada en 2014 por el Concejo Deliberante- pero sobre todo un tipazo.

Y lo que recibió este viernes fue una grata sorpresa en un momento de plena recuperación tras la intervención quirúrgica a la que fue sometido en noviembre pasado, cuando le colocaron una prótesis en su cadera.

"Tito" Lamberti se recupera y emociona: visitó este viernes su casa remodelada

“Tito” llegó este viernes en horas de la siesta a su vivienda de López y Planes al 1600, a bordo del automóvil de Edgardo Benvenuto, uno de sus íntimos amigos. Descendió y tomó el andador que lo ayuda a trasladarse. En el lugar lo esperaban más amistades que conformaron el grupo que lanzó en 2020 una campaña para ayudarlo primero a concretar la operación, pero también a reacondicionar su casa que estaba muy deteriorada.

Con lo primero que se topó Lamberti fue el frente de su casa no solo pintado, sino también con una imagen que marca su silueta y también dos carteles, uno con una frase suya: “Si tienen penas de amor no se las escribas al viento, recuerda siempre que el viento no sabe leer” y otro donde realiza una recomendación: ver el film “Juegos prohibidos” del francés R. Clement, ya que es un amante del séptimo arte. Además vio reflejada su imagen en un colorido mural que pintó el artista plástico Lucas Abrate (Purpulem), en un ingreso al patio desde el frente.

Recorrida

Ya dentro de la casa, Lamberti empezó a recorrer los distintos espacios. La sala de estar quedó adornada en sus paredes con varias gráficas del cine, con rostros de actrices y actores. Luego se dirigió a la habitación donde le construyeron un baño: “Este es el baño que me dijeron que no lo tenía ni (Leonardo) DiCaprio”, dijo entre risas. Tras ello, dio la vuelta y les dijo a todos: “Amigo es el que está cuando hace falta… ustedes estuvieron más que cuando hacía falta”, por lo que recibió como respuesta un aplauso. Tras ello destacó que la casa quedó “una maravilla” y volvió a agradecer: “Muchas gracias, de corazón se los digo, cuando esté un poco mejor aparezco por acá porque con todo lo que hicieron ustedes me recuerdan en algo a mi papá y mi mamá que fueron muy buenos conmigo”.

"Tito" Lamberti se recupera y emociona: visitó este viernes su casa remodelada

Mientras “Tito” recorría otra habitación, Antonio Dimonte, otro de sus amigos que fue parte de la campaña, le destacó haber generado un grupo humano “lindo” y una “gran amistad”. Después le pidió perdón si algo de la casa “no quedó como hubiese querido, pero tratamos de conservar lo mejor”. Además le deseó una pronta recuperación y aseguró que el sueño de quienes estaban allí presente era volverlo a ver en su bicicleta: “Sos un tipo que sembró mucho amor”, le dijo Dimonte.

Lamberti fue por ultimo al patio y regresó a la calle bordeando el colorido mural realizado por Purpulem, al cual le devolvía una mirada de sorpresa. Mientras seguía la charla, dejó una reflexión sobre la pandemia del coronavirus y lo que vendrá: “Los jóvenes son los que van a salir mejores con todo esto”, afirmó. Y sí, si algo tuvo “Tito” es un feeling especial con ellos y puede que no se equivoque.

Los problemas de salud

Lamberti empezó a tener problemas el año pasado en una pierna, lo que le impedía casi caminar. En agosto sus amigos lo acompañaron al médico (Fernando Prámparo, quien lo operó), donde se decidió su intervención.

Luego, sus allegados consiguieron convencerlo para que se opere y al mismo tiempo lo convencieron para que se aloje en una residencia para adultos mayores en la etapa previa a la operación y también hasta que su casa quede remodelada. Aunque este último paso se cumplió, el ilustre ciudadano seguirá un tiempo más en la residencia hasta que su recuperación sea completa.

"Tito" Lamberti se recupera y emociona: visitó este viernes su casa remodelada

Eusebio "Tito" Lamberti

Es hijo de Constancia Puchietti y Juan Lamberti. Nació en nuestra ciudad el 9 de noviembre de 1936. Se desempeñó durante 14 años en la fábrica de productos alimenticios Tampieri; luego pasó por una fábrica de muebles metálicos antes de llegar al San Martín para ser durante 22 años ordenanza.

Fanático del cine, de los libros -que compra, lee y luego dona- y de su querido club El Tala donde fue jugador, director técnico y ocupó casi todos los puestos dentro de la institución. También fue un destacado ordenanza del colegio San Martín.

Publicó tres libros titulados: "Los tiempos del barrilete", "El camino de la vida" y "Años de colegio, días de video, poesía y otros relatos".

En junio de 2014 recibió la distinción de Ciudadano Ilustre de San Francisco, otorgada por el Concejo Deliberante. Además, fue distinguido por Uces como "maestro inolvidable".

"Tito" Lamberti se recupera y emociona: visitó este viernes su casa remodelada