El director ejecutivo de Cáritas Argentina, Nicolás Meyer, visitó San Francisco y parte de la región que abarca la Cáritas Diocesana, para conocer el trabajo y los proyectos que llevan a cabo los voluntarios y profesionales de cada comunidad.

Luego de recorrer y empaparse de la realidad del comedor y merendero La Virgencita, donde además funciona la cooperativa de trabajo de reciclado, Mayer admitió encontrarse con “una Cáritas muy activa, con muchos voluntarios, eso te da esperanza, veo una comunidad muy viva que tiene ideas, proyectos, que está ampliando, edificando, que sueña en grande”.

E insistió: “La cooperativa tuvo un crecimiento muy grande y eso es familia que tienen más ingresos. Algo también a destacar es que en pandemia, que fue un tiempo muy difícil, los voluntarios no se quedaron adentro, no se encerraron sino que fue una Cáritas que salió, que estuvo presente cerca de la gente que peor la estaba pasando”.

El referente de Cáritas a nivel nacional comentó no conocer “esta zona de Córdoba, así que quise venir especialmente. Sabía del trabajo que venían haciendo, pude recorrer Las Varillas, Arroyito y  conocer también los proyectos, entender cómo la diócesis eligió trabajar”.

En su recorrida Mayer adelantó que desde el próximo año Cáritas Argentina comenzará a implementar el programa de viviendas para la zona norte de la diócesis: “A nivel nacional están proyectadas unas 1200 viviendas y en la diócesis unas 100 que se construirán en nueve comunidades como Seeber, Colonia Vignaud, Colonia San Pedro, Paquita, Altos de Chipión, Balnearia, Marull, Toro Pujio y Miramar”, informó.

Cartonear para salir del infierno de la prostitución: “Entre la basura me siento más limpia”

La cooperativa "La Virgencita"

A su vez Mayer quedó sorprendido de la estructura y organización de la cooperativa por lo que manifestó: “Fue teniendo un crecimiento gradual, hoy está en un paso de consolidación donde el objetivo está puesto en ganar volumen, en acortar la cadena de valor para poder mejorar el precio para las familias que venden el cartón y en sumar personas que en diferentes roles puedan ampliar las posibilidades para tener más ingresos”.

En este sentido recordó: “Somos un proyecto de promoción humana y buscamos que las personas que se acercan tengan otro tipo de acompañamiento, donde podamos trabajar el tema de las adicciones, sus derechos vulnerados y otras realidades que son necesarias acompañar”.