El Consejo Federal de Educación, formado por el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, y sus pares del resto de las provincias, aprobó la unificación del ciclo lectivo 2020 y 2021. Además, se definieron los criterios de evaluación, acreditación y promoción, en el corto y mediano plazo para el retorno progresivo a las escuelas.

Asimismo, se acordó que hasta que no esté disponible la vacuna contra el coronavirus continuarán las clases de forma no presencial de acuerdo a la situación de cada región. Cada provincia reorganizará los contenidos en cada nivel educativo y decidirá cómo volver a las calificaciones.

En ese sentido, en San Francisco la coordinadora de la Mesa de Articulación de Educación Provincia-Municipio, Claudia Maine, brindó su opinión sobre los cambios que se implementarán.

“Responde a las condiciones actuales que estamos viviendo, inesperadas para todos, cuyo fin tampoco tenemos muy claro. Entonces las medidas se van tomando en función de lo que se va viendo en la evolución de esta pandemia que no nos afecta solamente a nosotros, sino que es internacional”, comenzó Maine.

La coordinadora destacó que el hecho de que otros países hayan empezado con la pandemia antes ayuda para conocer sus experiencias. “Hubo países como Israel o España que tomaron la decisión de volver a las clases y después tuvieron inconvenientes serios. Entonces en función de las realidades que conocemos de otros países y de la experiencia propia, con las capacidades con las que disponemos en nuestro país de acceso a la tecnología, creo que los ministros de la Nación y de las provincias en el marco del Consejo Federal de la Nación tomaron una decisión muy pertinente”, resaltó.

Para Maine, la decisión tiene que ver con la equidad y las posibilidades de acceso a la educación. “Pero siempre con justicia social, porque no todos han tenido las mismas oportunidades ni las mismas posibilidades. Este año los docentes hicieron un esfuerzo ciclópeo para poder lograr aprendizajes efectivos en sus estudiantes, pero si ya es difícil sostener matrícula en la presencialidad, más difícil es sostenerla cuando algunos estudiantes no tienen ni siquiera un celular para poder recibir los materiales necesarios para acceder a los conocimientos”, graficó.

La especialista destacó el esfuerzo de los integrantes de las escuelas, que en algunos casos llevaron materiales impresos a los alumnos ya que se les dificultaba el acceso a internet.

Formato de educación y evaluaciones

Maine cuestionó también si el formato actual es el único posible: “Tenemos que pensar si esta educación graduada que tenemos desde hace un siglo es el único formato posible. Desde hace tanto venimos hablando de que las capacidades se van adquiriendo progresivamente y de que no hay una edad puntual cronológica para acceder a ella. Creo que todo problema tiene grandes oportunidades. Esta es la oportunidad para poder pensar en un sistema más transicional que permita el logro de los aprendizajes progresivamente y según las potencialidades de cada persona”, consideró.

A su vez, señaló que esto permite confiar en que todos pueden aprender y que a veces a distintos ritmos y tiempos. “Todos son capaces de hacerlo, entonces para el paso al nivel inicial de la sala de 5 al primario hay una continuidad; nosotros ya teníamos la experiencia de unidad pedagógica entre primero y segundo grado del nivel primario. Ahora esto se aplica más generalizadamente”, opinó.

En ese sentido, subrayó que todos los alumnos fueron evaluados en todos los niveles y modalidades y explicó que si bien no se hizo la acreditación y la promoción, ni se va a hacer momentáneamente, los estudiantes sí son evaluados a través de rúbricas que permiten ver los progresos particulares de cada uno.

“Esa evaluación es sumamente valiosa y cada docente irá viendo de qué modo recibe a los alumnos que ingresan y qué necesidades de acompañamiento va a tener cada uno de los estudiantes. En cierto modo es una educación más personalizada”, expresó.

Promociones

En cuanto a las promociones de niveles y en qué condiciones se encontrarán esos estudiantes el próximo año, Maine explicó: “Los docentes ya vienen desde hace años trabajando en el primer año para que ese año sea transicional, es decir, para que se vaya dando la articulación entre interniveles. Esta vez habrá que trabajarlo más intensamente y se prevé, según lo que informaron desde el Consejo Federal de Educación, un tiempo, los primeros meses, para que los alumnos, sin tener nada pendiente, puedan hacer las capacitaciones necesarias para acceder a los conocimientos necesarios que requieren en el nivel superior; y los que finalizan el nivel secundario también van a tener un tiempo, los primeros meses del año próximo, para ponerse a tono con aquellos saberes que no lograron acreditar”.

Y sumó: “Este formato implica que a los ingresantes a un nuevo nivel se los va a tener que acompañar y están previstas acciones de acompañamiento para que todos puedan insertarse, porque sabemos que no se puede acceder a un conocimiento de mayor complejidad sin haber afianzado el anterior, pero eso se va a ver trabajando progresivamente, porque tampoco tenemos mucha certeza de lo que va a suceder el año próximo, en función que desconocemos los efectos de la pandemia, entonces progresivamente se irán tomando otras decisiones, la decisión inmediata es que no a existir una promoción inmediata, una acreditación numérica de los saberes evaluados”.