“El viaje como terapia”, el tema de un libro de una escritora sanfrancisqueña

Ivana Pucheta (37), psicóloga y profesora de Psicología de San Francisco, visitó El Periódico para presentar su libro “Viajamos a bordo de la vida” (2017), en el que narra vivencias y brinda consejos a viajeros aventureros.

La escritura comenzó, cuenta, a partir de sus viajes. Conocer lugares, asegura, es parte de su vida. “Me considero persona, mujer, viajera y después profesional”, afirma.

Precisamente su primer libro llegó luego de uno de sus viajes a Italia hace cuatro años. “Ese fue como un viaje que de alguna manera me marcó por distintas cuestiones y ahí decidí que ya era el momento de compartir lo que estaba viviendo, porque además antes de todo eso desde mi profesión había escuchado a varios pacientes y a través de sus relatos es como que pude sacar lo más importante, o aprovechar, o compartir lo más importante de viajar para la salud mental”, cuenta.

Y agrega: “A partir de ese viaje sentía que ya no podía callar más lo que estaba viviendo en esto del viaje como terapia, desde la salud mental e integral. De hecho una parte del libro habla de cuáles son los ‘souvenires’ del viaje, como el imán para la heladera. A nivel simbólico, un viaje tiene muchos  ‘souvenires’, desde la estimulación cognitiva, la estimulación de la memoria, la ubicación tempoespacial, lo social, hacer amistades, generar endorfinas, hormonas que tienen que ver con la felicidad, el placer, es como que llegó un momento que tuve ganas de compartirlo”.

“Un manual para el viajero”

“Un manual para el viajero”. Así define Pucheta a su libro. “Tiene desde el armado de una mochila o de una valija hasta los beneficios del viajar. De hecho los capítulos no son lineales. Qué es viajar, por qué viajamos, para qué viajamos, un manual que se comparte. Y si bien relato alguna vivencia, no es un libro donde sólo relate experiencias de viaje. De hecho es lo que menos aparece en el libro”, sostiene.

Para Pucheta, cuando uno viaja “hay un antes y después”. “Se va uno y vuelve otro a nivel identitario, a nivel de quiénes somos”, dice.

Para ella, a pesar de que en un viaje también pueden suceder cosas que no estaban previstas, siempre se aprende. Por eso, afirma, cada viaje es también un camino de aprendizaje integral. “Tarde o temprano uno crece interiormente. De hecho el libro se llama ‘Viajamos a bordo de la vida’ porque tomo la vida como un viaje. El libro juega mucho con lo real y lo simbólico”, refiere.

Para quién

La profesional subraya que el libro está pensado “para todos”: “De hecho en una parte, usando mi profesión como puente, les permito a distintas personas escribir conmigo el libro, relatar lo que para ellos es viajar a nivel de palabra y de imágenes. Y eso lo hice en niños y grandes. Aparece lo que es un viaje a lo largo de la vida porque también el sentido del libro es evolutivo”.

Asimismo, en el texto se le da lugar a las diferencias de viajar a lo largo de la vida, rescatando también el sentido de viajar en la tercera edad, así como al contraste histórico de viajar hace 100 años y en la actualidad.

En cuanto a la respuesta que tuvo con su libro, Pucheta manifestó: “Me ha pasado de maestras, de colegas, amas de casa, desde esta condición de ser personas y personas viajeras, que se han sentido identificadas y las ha ayudado a interpretar el sentido de sus viajes, o a ver esta veta saludable que pueden llegar a tener”.

“Es un libro para leer en período de vacaciones y durante el año. De hecho se puede empezar por cualquier parte. Te motiva a viajar. La mayoría lo lee durante el viaje. A mí me satisface muchísimo como escritora que sea un libro viajero, que se lleve en una valija, pero también se puede leer al regreso como para hacer una reinterpretación de lo que has vivido y vivenciado, las distintas etapas. De hecho lo divido en previaje, viaje y posviaje”, dijo.

Y recomendó: “Por eso en enero, que es época de viajes, se puede leer. Pero también durante el año cuando ya pasó y se planea otro viaje”·.

El libro puede conseguirse en San Francisco en Librería Collino.