Días atrás, el Servicio Meteorológico Nacional anunció que el fenómeno climático de "El Niño" ya está presente en nuestra región. Respecto a las implicancias de este fenómeno y al impacto que pueda tener en nuestro país, y principalmente en nuestra región, Roberto Bohn, jefe de la estación climatológica y meteorológica de UTN San Francisco, se explayó en La Mañana de El Periódico.

“En el Pacífico Ecuatorial, es decir, sobre el Ecuador del Océano Pacífico, hay una masa de aire cálida superficial que se mueve hacia Oceanía, hacia el oeste, o viene hacia el este, hacia nuestro continente, más precisamente la zona de Perú, Ecuador, toda esa zona. Cuando eso ocurre, por debilitamiento de los vientos alisios que soplan hacia el oeste permanentemente, esa masa de aire cálido llega al llega a tocar el continente. Eso ha ocurrido desde mediados de julio, más o menos”, comenzó.

En ese sentido, continuó: “Se notó que esos vientos se debilitaron y el agua superficial del Océano Pacífico llegó hasta Perú. Ese es el indicador de El Niño”.

En cuanto a los cambios que trae este suceso, sostuvo: “Eso significa que al ser el agua más cálida, hay más posibilidad de de evaporación. Al evaporarse, hay más nubes, hay más humedad en la atmósfera, y esa humedad en la atmósfera puede ser traída por los vientos hacia América del Sur y eso es lo que lo que significa El Niño”.

Según comentó, este fenómenos y el de La Niña se dan en alternacia en periodos de entre dos y siete años. “No tiene un período preestablecido. Por ejemplo, estuvimos con La Niña durante tres, cuatro años pasados. La Niña es el opuesto. Es decir que esa masa de agua de aire cálido se va para el lado de Oceanía. Los vientos alisios son más fuertes y arrastran la superficie de aire cálido del agua cálida del océano hacia Oceanía”.

¿Más lluvias?

Tras recordar que este acontecimiento había sido confirmado primero por la Agencia Meteorológica Estadounidense, y ahora por el Servicio Meteorológico Nacional, manifestó que se hará notar principalmente entre los meses de septiembre, octubre y noviembre, cuando lleguen las temperaturas más cálidas.

“Esto puede significar mayor frecuencia y mayor milimetraje (de lluvias). De todos modos no todo el país está afectado, generalmente donde más se pronuncia el efecto de El Niño sobre Argentina es en la zona de la Pampa húmeda, en la región mesopotámica, Entre Ríos, Corrientes, sur de Santa Fe, norte de Buenos Aires”, detalló.

De todas maneras, Bohn fue cauto: “A nosotros nos toca un poquito de costado en cuanto a intensidad de precipitaciones. No sabemos qué va a ocurrir. Han habido antecedentes de inundaciones en las lluvias en la Cuenca del Salado, que después eh han repercutido en la inundación de Santa Fe. Y cuando el milimetraje es intenso, como pasó por ejemplo ahora este fin de semana en que llovió en la Mesopotamia, en Ituzaingó, Corrientes, hay inundación. Allói cayeron 280 milímetros en 24 horas. Son puntos muy críticos que dejan mucha agua en poco tiempo. Ese es el problema. Por lo tanto se no se sabe exactamente qué es lo que que se espera”.

“Sí, al predecir que hay un fenómeno del Niño con un 99% de probabilidades, empieza a haber más probabilidad de que ocurran fenómenos meteorológicos extremos. Lluvia extrema en corto tiempo, lo cual acarrea inundaciones y demás yerbas. Ahora ¿qué nos va a pasar exactamente en en la ciudad o en esta zona? Eso no se sabe exactamente”, cerró.

¿Qué es El Niño / La Niña?

Según el Servicio Meteorológico Nacional, El Niño/Oscilación del Sur (ENOS) es un fenómeno natural caracterizado por la fluctuación de las temperaturas del océano en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial, asociada a cambios en la atmósfera. Este fenómeno tiene una gran influencia en las condiciones climáticas de diversas partes del mundo.

El ENOS es uno de los patrones más importantes de la llamada variabilidad climática interanual, que incluye modificaciones de la circulación de la atmósfera que pueden durar desde varios meses a pocos años. El Niño y La Niña son los componentes oceánicos, mientras que la Oscilación del Sur es el componente atmosférico, y ambos dan origen al término El Niño/Oscilación del Sur. Este fenómeno comprende tres fases: El Niño, La Niña y una fase neutra.

Los efectos de esta oscilación sobre nuestro país son diversos y varían dependiendo de la fase, la región y la época del año. En particular durante la primavera y verano el noreste argentino tiende a registrar precipitaciones superiores a las normales durante una fase El Niño. Durante la fase La Niña misma zona tiende a registrar precipitaciones por debajo de lo normal.

El fenómeno tiene una periodicidad irregular, usualmente ocurre cada dos a siete años, y se declara una fase El Niño/La Niña cuando las temperaturas del mar en el Pacífico oriental tropical aumentan/disminuyen 0,5°C por encima/por debajo del promedio durante varios meses consecutivos (5 trimestres).

Se cree que el nombre de este fenómeno se originó hace siglos atrás por "El Niño Jesús", cuando en fechas cercanas a la Navidad, los pescadores peruanos  se refirieron al fenómeno meteorológico en honor al recién nacido Niño Jesús.