Atrás quedaron los viajes exóticos, los regalos carísimos y las demostraciones públicas de amor entreLeandro Penna y Katie Price. Todo eso quedó en el olvido… y ninguno de los dos parece tener el mejor de los recuerdos del otro.

Sucede que desde que trascendió la separación de la pareja, los dardos vuelan de un lado a otro. El primero en criticar a la mediática inglesa fue Leandro: “La dejé sencillamente porque está loca. Katie tiene los cables pelados o no se le conectan bien. No sé qué le pasa”, aseguró a la revista Caras.

Price recogió el guante y publicó una columna en el diario sensacionalista The Sun, donde afirma: “Estoy cansada de ser la que siempre paga las cuentas en una relación. Estoy cansada de comprar mis propios anillos”, aseguró, visiblemente molesta por las últimas declaraciones de su ex.

“Me imagino que la plata habla. La verdad sobre Leandro y yo es que tuvimos una relación, con altos y bajos, que terminó. Le pasa a la gente todos los días (…) Si Leandro quiere que una realidad mundana se convierta en un drama así puede cobrar un cheque, entonces, buena suerte”, disparó, dando a entender que Penna hablaba con la prensa por dinero.

Y disparó: “Pero yo sé que él no se quejaba cuando vivía en mi casa, comiendo con mi familia y gastando mi plata. Me dije: ¿si era tan malo todo, por qué gastó dos años conmigo?”. Como despedida, le regaló a su ex novio una broma sobre su nivel de inglés: “Estoy disfrutando otra vez de las bromas en inglés, luego de todos estos meses de tratar de tener una relación a través del traductor de Google”. ¡Contundente!