El personaje de Gimena Accardi en Sos mi hombre dio un giro inesperado cuando comenzó a tener dudas sobre su sexualidad. Y después de muchas vueltas, finalmente se animó a tener una cercamiento más intimo con la mujer que la atrae, su entrenadora, interpretada por Luciana González Costas. 

La actrices protagonizaron una de las escenas más jugadas y subidas de tono de la tira. Desde hace algunos capítulos, Brenda, el personaje de la bella blonda, comenzó a sentir una irrefrenable atracción por las mujeres. Estas nuevas sensaciones la confrontaron con prejuicios y miedos que, hasta ahora, le impidieron vivir con libertad su sexualidad.

En el capítulo del martes, emitido por el El Trece, Brenda finalmente dio riendas sueltas a sus fantasías. Marisa, el papel de González Costas la sedujo y los deseos de hacer el amor se tornaron incontenibles. Una vez solas, se besaron apasionadamente, aunque la noche no fue la esperada por Brenda: Marisa la dejó sola, "pensando". Las ganas siguen latentes.