Por Emanuel Gallegos *

Parece que hubiese sido ayer cuando el baile de invierno de la Escuela de Hawkins nos mostraba a nuestro segundo grupo favorito de amigos (disculpen, hay un solo lugar en lo más alto del podio de mi corazón, y “El Club de los Perdedores” no se va a mover de ahí), bailando dulcemente, mientras las estrofas de “Every Breath You Take” inundaban el salón del colegio.

Como si esa fuese su única preocupación en ese momento, la de cualquier joven a esa edad, como si no hubiesen tenido que afrontar nuevamente, el peligro mortal, las criaturas y los monstruos, que el UpSide Down vomitaba desde el otro lado de nuestra dimensión. Pero la canción, que parecía ilustrar un cierre soñado para el grupo de amigos, no era otra cosa que un tétrico recordatorio de que, en realidad, nada terminó ahí. Que Eleven cerró el portal, sí, (en una de las demostraciones más épicas del poder que la weirdo contiene y puede desplegar), pero que, evidentemente, no fue suficiente, o que llegó demasiado tarde.

“Cada paso que des, te estaré observando”, nos avisa la enorme y aterradora figura del Shadow Monster, recortada sobre el horizonte de Hawkins. Y no, nada terminó. De hecho, el último intento de la amenaza mortal que se esconde allá, del otro lado, ni siquiera arrancó.

5 razones por las que necesitábamos volver a Hawkins

Es por eso que hoy, 4 de Julio, después de haber contado cada día que pasó desde octubre de 2017 (igual que Eleven contando los días que transcurrieron desde la última vez que vio a Mike), ya es hora de volver al pequeño pueblo de Indiana. Con la mochila cargada, el walkie-talkie sintonizado en la frecuencia correcta, el bate con clavos de Steve Harrington (en su versión más bad-ass) y muchas ganas de ver nuevamente al grupo de amigos en acción, volvemos a Hawkins. Pero esta vez, con la malla puesta, porque volvemos en verano, el verano que puede cambiarlo todo.

Si todo esto que acabo de contarles, no les parece suficiente motivo para embarcarse en esta hermosa, apasionante y peligrosa aventura, acá les dejo 5 razones para volver a Hawkins:

LA NOSTALGIA OCHENTERA: los eventos principales de la serie arrancan en 1983, por lo que la serie entera está teñida del espíritu de los 80’s. Quizás sea la música el elemento que mejor logra transportarnos a aquella década. Desde “África”, de Toto, que acompaña aquella escena en la que Steve “ayuda” a Nancy a estudiar en su cuarto, o el poder trash de “Should I Stay or Should I Go”, que ya se convirtió en un distintivo musical de la serie, o incluso, el clásico de clásicos, como es la canción original de “Ghostbusters”, que, junto a los trajes de la película que visten los jóvenes protagonistas afirman, sin ninguna sutileza, que lo que estamos viendo en la pantalla pertenece a aquella gloriosa época. Pero no solo la música es el vehículo que utiliza Stranger Things para transportarnos a la “década reganniana”. La estética de la imagen de aquellos paisajes urbanos, en los que no puede faltar la maravillosa sala de videojuegos arcade (como es el The Palace, uno de los puntos principales del mapa de Hawkins), la paleta de colores de la fotografía, emulando la saturación del tecnicolor, y hasta los recorridos de cámara y los encuadres utilizados, son todas las estrategias audiovisuales que sellan el componente retro de la serie.

LA BANDA SONORA: atención, acá no estamos hablando de la selección de canciones que componen el soundtrack, acá hablamos de la maravilla musical que lograron Kyle Dixon y Michael Stein, el dúo integrante de “Survive”. El sonido creado a partir de sintetizadores, es el sonido propio y característico de aquella época, y que, junto a una imagen saturada de neón, les daban forma a los productos de la cultura pop más memorables de la década (Tron, Blade Runner, por mencionar algunos). Stein y Dixon lograron capturar el espíritu y la magia de aquellas producciones, y lo convirtieron en una de las mejores, y más originales BSO de los últimos años, y que se convirtió en un elemento inseparable de la esencia de la serie tal cual la conocemos.

LOS PROTAGONISTAS SON LOS NIÑOS: desde el principio de la serie, cuando Will Byers desaparece misteriosamente la noche del 6 de noviembre de 1983, son sus amigos los que comienzan a tomar las decisiones más acertadas y los que guían a los adultos a desandar el camino hacia las respuestas que buscan. Con sus propias referencias (el juego de mesa “Calabozos y Dragones” utilizado como LA metáfora para entender el concepto del UpSide Down), sus propios códigos y su inagotable esperanza de encontrar a Will sano y salvo. Serán ellos mismos quienes descubran los misterios que se esconden en Hawkins y que los adultos, con toda su sensatez y su instituida manera de ver el mundo, no pueden ver. Serán las bicicletas, entonces, las que allanen el camino que la patrulla policial y toda la legión de adultos recorrerá.

LA AMENAZA: atrás quedó el Demogorgon de la primera temporada, cuando creímos que representaba la amenaza en su totalidad, solo para descubrir, que el villano del inicio era solo un cachorro salvaje, hambriento y perdido en esta dimensión. Algo se rompió. El velo que separa nuestra realidad, tal cual la conocemos, de aquella dimensión con el aire viciado y tóxico, se rasgó en varias de sus costuras y es por allí donde las amenazas del UpSide Down se están colando a nuestro mundo. El Shadow Monster de la segunda temporada parece ser quien en realidad controla y gobierna aquella dimensión, y que, al parecer, tiene la firme intención de extender su control y su poderío, ya no sobre Hawkins, ni sobre Indiana, sino sobre todo nuestro mundo. ¿Podrán nuestros jóvenes héroes, y su ejército de amigos, familiares y habitantes de Hawkins contener por fin el peligro y la amenaza que se ciernen sobre todos nosotros? ¿O quedará nuestra dimensión finalmente convertida en un paisaje más del UpSide Down?

UN VERANO PUEDE CAMBIARLO TODO: vamos a enfrentar la mayor amenaza que hayamos enfrentado, sí, pero esta vez lo vamos a hacer en mallas y mangas cortas. Los eventos de esta temporada van a tener lugar en el verano del 1985, por lo que el ambiente va a ser totalmente diferente a lo que vimos anteriormente. Los habitantes de Hawkins podrán disfrutar de un chapuzón en la pileta municipal, al cuidado del flamante guardavidas Bill Hargrove, que despertará los suspiros de varias madres del pueblo. Mike, Lucas, Dustin, Will, Eleven y toda la tropa, también estarán disfrutando de sus vacaciones de verano, con todo lo que eso implica. Un nuevo centro comercial inaugura en Hawkins (el Starcourt Mall) y será el lugar que elegirán los jóvenes para pasar gran tiempo de sus vacaciones. Pero no solo funcionará como sitio de encuentro adolescente para pasar el rato, ya sabemos que será el lugar donde se llevará a cabo la gran batalla final (el capítulo de final de temporada se llama “La Batalla de Starcourt).

* Especial para Cartelera de El Periódico TV