Tras un período de recuperación en los centros de rescate Tatú Carreta y de la Biodiversidad, Policía Ambiental regresó a la vida silvestre a 41 aves en la reserva "Boca Toma" de Río  Segundo.

Se trata de jilgueros, reinamoras, corbatitas, brasitas de fuego, pepiteros de collar o semilleros, cardenales copete rojo, monteritas cabeza negra o luisitos, vira vira y piquitos de oro; según se precisó oficialmente.

Participaron de la actividad el secretario de Policía Ambiental, Adrián Rinaudo, junto al intendente de Río Segundo, Darío Chesta; el secretario de Obras, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Facundo Frontera; el secretario de Control y Prevención Ciudadana, José Sincovich; el director de Medio Ambiente municipal, Juan Carlos Carrizo; el subdirector de Medio Ambiente, Adrián Pedraza; y el director de Defensa Civil, Darío Saldaña.

“Aprovechando las temperaturas aún altas para la época del año, liberamos 41 aves en este hermoso lugar que es apto por su bosque nativo y ríos, entre otras características, para la subsistencia de los ejemplares luego de haber vivido en cautiverio”, dijo Adrián Rinaudo, secretario de Policía Ambiental.

Y agregó: “Esto es para nosotros como un premio, ya que detrás de cada liberación hay mucho trabajo por parte de las distintas áreas que conforman Policía Ambiental y a esto se suma el que realizan los Centros de Rescate en la rehabilitación de la fauna silvestre”. 

El área técnica de la repartición determinó que la liberación se efectúe en “Boca Toma” por ser área de distribución de los ejemplares -donde éstas especies están presentes e interactúan de manera no efímera con el ecosistema- y por contar con vegetación leñosa y arbustiva, provisión de agua y refugio, y una adecuada heterogeneidad espacial.

Fuente: La Nueva Mañana