Entre las tantas historias que tiene el Superclásico, está la de los hermanos Gustavo y Leonardo Rassetto. Uno de River y otro de Boca. Los dos son fanáticos y muy comprometidos con sus clubes. Al largo de los años tienen cientos de anécdotas y no recuerdan haber visto un clásico juntos.

“Soy el único hincha de River en la familia, pero en realidad primero somos hermanos y después somos hinchas, en ese sentido vivimos a las gastadas. Siempre con respeto, y para este partido lo vivimos muy ansiosos. Estamos contentos de que estén los dos en la final”, comentó Gustavo.

Y agregó: “Lo vamos a mirar por separado, cada uno en su casa. Pero pensando, me doy cuenta que prácticamente nunca vimos un superclásico juntos. Porque cuando vivíamos juntos, o uno se iba, o bien lo mirábamos uno arriba en su pieza y otro en el comedor”.

La apuesta

“Hay un asado para toda la familia, completo”, dijo Gustavo. “Hay que ver si paga, porque es medio duro para cobrarle. Se quedó debiendo algún fernet”, retrucó Leonardo.

Una madre como mediadora

Leonardo recordó que ya desde chicos bromeaban al respecto. “Nos gastábamos mucho cuando éramos chicos, él es el hermano más chico y siempre lo hacía enojar. Vivo en una casa con escaleras y cuando se fueron a la B, cada vez que bajaba era un show en casa, pero siempre bromas bien, sin zarparse, esa picardía que tenemos de hermanos con el futbol”, dijo Leonardo.

“El gordo es un personaje, las cosas que nos hemos hecho. Algunas no se pueden contar. Y mi vieja, Alicia, es el árbitro en la casa. Con las típicas cosas que te dicen las madres ‘ustedes se pelean y los otros se llevan la plata’. Dentro del folklore, lo que vivimos es muy lindo como hermanos, aunque más que un hermano es un hijo porque es gallina”, indicó.

Compromiso por el club

“Yo estuve mucho tiempo en la gestión de la Filial de River, hace algunos años. Después tuve que priorizar mi carrera y el trabajo, me tuve que alejar un poco. Nos pasaban cosas graciosas porque nos invitaban a hacer notas representando cada uno a su club e íbamos, los dos de apellido Rassetto, y se sorprendían, teníamos que explicar que éramos hermanos”, contó Gustavo.

“Algunas cosas entre la Filial y la Peña pudimos hacer, realmente es un estilo de vida el fútbol. Con él compartimos muchas visiones en cuanto a lo institucional, pudimos volcar ese amor que tenemos por el club en la Filial y en la Peña, fue muy lindo”, precisó Leonardo.

“Tuve la posibilidad de ir a la primera final y el partido tiene una dimensión enorme. Es un espectáculo muy bueno, si Boca gana y da la vuelta en el Monumental es como mandarlos a la B de nuevo. Ganarles ahí sería un broche de oro”, señaló Leonardo.