A pocos días del inicio, ya se palpita la 44° edición del Campeonato Nacional de Baby Fútbol que se desarrollará a partir del 11 de enero del próximo año. Este lunes se realizará la presentación oficial de la competencia que contará con 55 equipos distribuidos en 11 sedes.

En ese marco, a modo de previa, Juan Manuel Aróstegui contó cómo fue su Nacional que lo tuvo como uno de los goleadores del campeonato y que, además, lo tuvo como campeón.

Yo lo esperaba con ansias porque es el torneo que cierra toda una etapa de tu vida, uno siempre esperó y disfrutó de esos momentos, de compartir con chicos de otras ciudades, de tener otras experiencias y vivencias, además de jugar con otros equipos, que eso no se daba muy a menudo. Fue una de las etapas más lindas de mi carrera”, sintetizó.

“Nosotros alojamos a los chicos de un equipo del partido de San Martín de Buenos Aires. Pero recuerdo que con los chicos de Newberton de Cruz Alta tuvimos una muy linda experiencia, habíamos alojado a la categoría 79 en el Nacional anterior, después siguieron viniendo en otras ocasiones, nosotros fuimos a Cruz Alta, también. Hicimos una linda amistad”, dijo el hoy dirigente de Sportivo.

¿Qué cambió?. “Cambió el comportamiento de los padres y eso de tener que ganar sí o sí, antes se disfrutaba un poco más y se veía a más familias en las canchas, del primer partido al último, toda la tarde. Noto que por ahí en mi época el papá que iba a ver a su hijo en la primera categoría se quedaba hasta la última y viceversa, ese por ahí es el cambio que noto yo”, explicó.

Otra época

Aróstegui recordó también que en aquellos años los chicos estaban todo el día en el club, que los clubes tenían una gran influencia en el barrio en parte también porque no existían todas las opciones que tienen hoy los jóvenes.

“Lo único que teníamos que hacer era jugar a la pelota y estábamos todo el día jugando, pero también no veíamos la hora de ir a entrenar y no faltábamos nunca. Ahora hay muchas opciones para divertirse, cosas para hacer; para nosotros era prioridad jugar al futbol”, dijo.

“Antes vivíamos en el club, yo tenía a una cuadra la cancha de Don Orione y a la otra cuadra estaba la cancha de General Savio donde ahora está el colegio 315. Nos juntábamos en la plaza a jugar al futbol con los chicos de Savio y si no era en la plaza era en la cancha de ellos, era nuestro pasatiempo, era estar en la cancha”, recordó.

“Hice 13 goles en el Nacional, salí segundo goleador. Recuerdo que la final se jugó en cancha de Los Andes, que estaba en calle 9 de Septiembre y Caseros. Fue en enero del 94”, recordó.

El mensaje

Por otro lado, Aróstegui dejó un mensaje para los chicos y para quienes deben acompañarlos en este campeonato que significa el cierre de una linda etapa de la niñez. “Cierran una de las etapas más lindas, que sepan que esto es de ellos y de nadie más. Hay que dejarlos que disfruten y que sepan encontrar la razón de este campeonato que es hacer amistades nuevas, jugar con otros chicos y despedirse de esa etapa. Para el que sigue jugando, van venir otras etapas más lindas, pero con otras responsabilidades. Espero que los disfruten y que se saquen la presión de tener que ganar, que lo vivan desde otro lugar y de esa manera lo van a disfrutar al 100 por ciento”, concluyó el goleador.