Jorge Almirón dejó de ser este domingo por la noche el entrenador de Boca tras la derrota ante Fluminense en la final de la Copa Libertadores y dejó libre el banco "xeneize" de un técnico permanente hasta el final de temporada, ya que el próximo 2 de diciembre habrá elecciones en el club y una contratación a menos de un mes resulta impracticable.

Al técnico se lo había visto muy molesto tras la derrota en la final en Brasil y le transmitió su decisión en la tarde del último domingo al vicepresidente Juan Román Riquelme en el predio de Ezeiza, apenas regresada la delegación a Buenos Aires.

EL club lo informó en un breve comunicado: “El Club Atlético Boca Juniors comunica a socios, socias y simpatizantes que este domingo 5 de noviembre, después de las 21 horas, Jorge Almirón informó que él y su cuerpo técnico, con contrato vigente hasta fin de la temporada, habían tomado la decisión personal de no continuar como entrenadores. Nuestra institución agradece los servicios prestados por todos ellos y les desea el mayor de los éxitos para el futuro”, publicaron en redes sociales.

Los jugadores tampoco hablaron demasiado en la noche del sábado en Río de Janeiro y las caras largas eran moneda frecuente, siendo solamente el capitán Sergio Romero el que hizo una leve referencia al error de Frank Fabra que provocó su expulsión y dejó a su equipo con 10 jugadores cuando su rival ´tenía la misma cantidad por la expulsión del goleador John Kennedy.

Almirón tenía contrato hasta el 31 de diciembre y el 2 de ese mes hay elecciones en Boca. En un período de 36 partidos el técnico oriundo de la localidad bonaerense de San Miguel "repitió el equipo solamente una vez, no tenía una línea de juego, no ganó ningún partido en los 90 minutos de octavos hacia adelante en Libertadores y la campaña en la Copa de la Liga (perdió 6 encuentros) era muy mala", eran los más importantes cuestionamientos internos que le hacían.

Por eso, la salida de Almirón fue una anticipación a lo que iba a suceder después de lo del sábado. El tiempo para presentar las listas para el acto comicial se vencerá el 19 de noviembre y en principio Riquelme no iría como candidato a presidente sino a vice de algún otro.

Mariano Herrón, campeón con la reserva, que está desde el comienzo de la gestión Ameal-Riquelme y ve todos los partidos en el palco de la Bombonera junto a este último, tomará interinamente al equipo otra vez después de los dos encuentros que debió dirigir entre la salida de Ibarra y la llegada de Almirón. Tendrá a Silvio Rudman, campeón intercontinental con el sub-20 del club recientemente, como ayudante de campo.