Después de doce años, la Selección argentina de fútbol femenino retorna a la cita máxima de este deporte.

Un equipo con un alto poder simbólico que, más allá de los resultados, quedará en la historia grande del fútbol nacional. Lo icónico de las dirigidas por Borello es superior a cualquier gol. 

Argentina debuta en Francia 2019, por el Grupo D, ante Japón este lunes desde las 13 en el Parque de los Príncipes. Un juego esperado, soñado...

De la Copa del Mundo participan 24 selecciones, y esta edición es, al momento, una de las de mayor repercusión. En el marco de los reclamos y de movimientos feministas como #metoo y #niunamenos, el fútbol no quedó fuera.

Como máximo ejemplo se da con la ausencia de la noruega Ada Hegerberg, ganadora del Balón de Oro 2019 y del premio de la BBC a la mejor jugadora del planeta. Ella decidió no asistir a Francia 2019 a modo de protesta porque, según dice, "no hay igualdad con el fútbol masculino".

Y el contexto no le escapa a la Argentina, que por primera vez en su historia, busca la profesionalización. En Buenos Aires llegó. San Lorenzo fue el primer club en firmar contrato con las chicas. Aunque, por el momento, lejos está de una federalización.