El Gobierno nacional incluyó en el decreto de necesidad y urgencia (DNU) dado a conocer la modificación de la Ley de Sociedades que les permite a las instituciones deportivas convertirse en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD).

"Modificación de la ley de sociedades para que los clubes de fútbol puedan convertirse en sociedades anónimas si así lo quisieran", dice el punto 27 de las 30 reformas que anunció el presidente Javier Milei en cadena nacional.

En el artículo 334 del DNU se modifica la ley de deportes y se establece a quiénes "se consideran asociaciones civiles deportivas integrantes del Sistema Institucional del Deporte y la Actividad Física".

En primer lugar, se menciona a "las personas jurídicas previstas en el artículo 168 del Código Civil y Comercial de la Nación, que tienen como objeto la práctica, desarrollo, sostenimiento, organización o representación del deporte y la actividad física, de acuerdo con los principios generales enunciados en el Capítulo I de la presente ley y reúnen las características que se indican en los artículos 20 y 20 bis".

En segundo lugar, se menciona a las "personas jurídicas constituidas como sociedades anónimas reguladas en la Sección V de la Ley N° 19.550 y sus modificatorias, que tienen como objeto social la práctica, desarrollo, sostenimiento, organización o representación del deporte y la actividad física, de acuerdo con los principios generales enunciados en el Capítulo I de la presente ley”.

De esta manera, cada club tendrá la potestad de definir si desea convertirse en SAD o mantenerse como una Asociación Civil. Varias instituciones del fútbol argentino tienen impedido estatutariamente la negativa a transformarse en SAD, por lo que, de plegarse a esta posibilidad, deberían modificarlo.

Qué son las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD)

Las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) están orientadas hacia el lucro, buscando beneficios individuales y ganancias. Los principales dueños de los clubes bajo este modelo son inversionistas.

En este contexto, los socios no participan en la toma de decisiones relacionadas con la entidad deportiva, ya que la responsabilidad recae completamente en los accionistas, que pueden ser empresas, individuos o entidades, a través de la representación en un Consejo de Administración.

Vale destacar que para respaldar sus operaciones, estos clubes pueden atraer inversiones extranjeras y tienen la opción de cotizar en bolsa como vías para financiar sus actividades.

En Europa también existen formatos mixtos, como en Alemania. donde impera la regla “50+1″. ¿De qué se trata? Que la inversión externa está habilitada, pero los socios retienen el 50% +1 voto para que “los miembros del club conserven el control general, protegiendo a los clubes de la influencia de los inversores externos”, según explica el sitio de la Bundesliga en español.

Hace unas semanas atrás, clubes representativos del país como Boca, River, San Lorenzo, Independiente y Racing rechazaron de manera contundente la llegada de las SAD al fútbol argentino por medio de publicaciones en sus redes sociales.

En el fútbol argentino todos los clubes son Asociaciones Civiles sin Fines de Lucro y son muy pocos los que tienen gerenciadas algunas de las actividades, como el caso del fútbol profesional, a diferencia de lo que ocurre en Chile, Brasil o Uruguay, donde proliferaron las Sociedades Anónimas.

En las organizaciones civiles los ingresos deben ser reinvertidos en el club, mientras que las Sociedades Anónimas tienen fines de lucro. 

Hace unos días los clubes del país rechazaron la idea de convertirse en SAD.
Hace unos días los clubes del país rechazaron la idea de convertirse en SAD.

Con información de Infobae y TyC Sports