El coronavirus, la crisis económica, los incendios y la sequía. Todos esos males atraviesa Córdoba en un 2020. A pocos kilómetros de la zona donde el fuego arrasó, Carlos Paz es testigo de otro drama muy relacionado: la falta de lluvias. En pleno centro de la villa serrana, cerca del puente Carena, el río San Antonio luce seco casi por completo.

Apenas charcos de agua resisten y las imágenes son preocupantes: el pronóstico no anticipa lluvias al menos para esta semana, el calor irá en aumento y se comienzan a generar preguntas por la provisión de agua potable si todo continúa así.