El arzobispo de Buenos Aires y cardenal primado de la Argentina, Mario Poli, aseguró hoy, en su homilía por el 25 de mayo ante el presidente Mauricio Macri y miembros de su gabinete, que "buena parte del pueblo" no tiene una vida digna" y que "la inequidad genera violencia".

Poli brindó un mensaje centrado en la pobreza y habló de la "deuda social" que existe en nuestro país. Aseguró que "buena parte del pueblo" no tiene "una vida digna" y subrayó que "la inequidad genera violencia".

Tabmbién advirtió que buena parte de la población "carece de lo necesario para una vida digna", aseguró que "hubo promesas incumplidas y fracasos", y que "los porcentajes invisibilizan el dolor de las familias" que "sufren desánimo" por su situación social.

"Las estadísticas veraces son muy buenas, porque nos advierten dónde estamos parados", sostuvo.

Fuerte mensaje de la Iglesia en el tedeum: "Hubo promesas incumplidas y fracasos"
En ese marco, pidió políticas de Estado "que sostengan un desarrollo humano integral". También llamó a los gobernantes "a superar la confrontación que nos roba la esperanza" y a buscar por el fecundo y arduo camino del diálogo un consenso creativo tan necesario para que se haga realidad el progreso de nuestras nación".Poli consideró hoy que "muchos pueden pensar que no hay motivo para fiesta patria cuando buena parte de nuestro pueblo no se siente invitado". A pesar del mal clima, el jefe del Estado caminó desde la Casa Rosada hasta la Catedral Metropolitana. Estuvo acompañado por la primera dama Juliana Awada; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti; la vice Gabriela Michetti; los ministros del Gabinete nacional; jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y las autoridades del Congreso; Emilio Monzó y Federico Pinedo, entre otros.