Unos 83 extranjeros que actualmente residen en la provincia de Córdoba serán expulsados a lo largo de este año por haber cometidos delitos que fueron comprobados por la Justicia.

Así lo informaron a La Voz fuentes de la Dirección Nacional de Migraciones (DNM), quienes explicaron las causas y procedimientos que se vienen llevando adelante en Córdoba y en el resto del país.

En la provincia hay en trámite 83 expedientes, de los cuales 38 ya están firmes (no hay apelación de la defensa ni otro impedimento circunstancial), por lo que la situación de los acusados es de inminente deportación.

Diego Puente Rosa, delegado de la sede cordobesa de Migraciones, explicó a este diario que todos los que serán deportados desde Córdoba ya están detenidos.

El trámite burocrático para la deportación es bastante simple para Migraciones, dado que los funcionarios responsables sólo deben esperar que el juzgado correspondiente a una causa autorice el procedimiento.

La Dirección Nacional de Migraciones dicta las expulsiones en todo el territorio nacional, pero el arresto, la retención y la expulsión dependen de las fuerzas de seguridad y de la Justicia.

El proceso

A partir de que llega la conformidad del juez para sacar al acusado al que se le comprobó un delito, la orden de expulsión demanda unas dos semanas de trámites. La complejidad del proceso material depende a partir de allí de la situación en la que se encuentre el acusado. En ese tiempo, Migraciones trabaja con el Servicio Penitenciario Jurisdiccional para garantizar el traslado del detenido, mientras el Consulado documenta el caso y se tramitan los pasajes en una aerolínea.

Mientras tanto, se coordina con la fuerza de seguridad correspondiente en el país de origen del expulsado para la entrega a las autoridades.

Todo se complica cuando el delincuente extranjero está en libertad o prófugo. Ahí se activa un protocolo en coordinación con las fuerzas de seguridad de todo el país para la aprehensión.

Una vez que la persona es detenida y dispuesta para su deportación, la condena continuará en su país de origen sólo si la Argentina tiene un convenio o acuerdo de extradición.

“Si hay convenio, se extradita a la persona y cumple la pena en su país de origen. Si se trata de una simple expulsión, el delincuente sale de la Argentina con custodia, pero, apenas se encuentra en suelo de origen, queda en libertad”, precisó Puente Rosa.

Al momento que el extranjero es expulsado, Migraciones dicta una medida provisoria con prohibición de reingreso al país, que será temporaria o permanente dependiendo de la gravedad del hecho.

“En general, en la mayoría de los casos, la prohibición es permanente porque se produce en delitos importantes”, manifestaron desde la sede nacional.

Estadísticas nacionales

Entre enero de 2016 y diciembre de 2018 en la Argentina hubo 649.876 pedidos y otorgamientos de radicación de extranjeros que llegaron al país.

En el mismo período, unas 1.432 personas fueron expulsadas por haber cometido delitos, es decir, un 0,22%. Hubo 234 casos en 2016; 495 en 2017 y 703 en 2018.

La impronta que el Gobierno de Mauricio Macri le viene poniendo a la política migratoria, con una mayor dureza para los extranjeros que delinquen, hizo que las expulsiones aumenten 200 por ciento en tres años de gestión. Y fueron conocidas las expresiones de las principales espadas del Gobierno para reforzar esta política.

Por la lenta y resquebrajada performance del Poder Judicial, hay casos en los que los extranjeros llegan a cumplir hasta dos tercios de la pena antes de que el juez dé su conformidad para la expulsión.

La excepción a una expulsión se da cuando el sujeto es un eslabón clave para otra causa, por lo que la Justicia necesita que continúe en territorio nacional.

Un caso testigo

El 22 de enero, un motochorro colombiano identificado como Jair Stevens Jurado Mora, de 24 años, fue dejado en libertad luego de 48 horas y con una multa de 700 pesos por haber robado un celular en el barrio porteño de Almagro.

Actualmente, tiene una orden de expulsión; sin embargo, las autoridades deberán volver a detenerlo para realizar la extradición, justamente, porque fue dejado en libertad a pesar de la comprobación del delito.

En la DNM aseguran que se trataría de un “caso particular”, pero aclaran que existe un centenar de extranjeros en esta situación y que serán expulsados por Migraciones cuando alguna fuerza de seguridad los detenga.

Fuente: La Voz del Interior